
Similar al Focus Zetec S que se vende en Gran Bretaña -aunque con otras llantas- el Focus Sport no está dirigido a aquellos que busquen más prestaciones o novedades técnicas -salvo por la incorporación de una suspensión deportiva específica: Es decir, ni por asomo es algo parecido a la versión ST que llegará más adelante -la cual estará disponible también con carrocería familiar, cosa que no sucede con el Sport-. Pero sí que está pensado como la mejor opción para los más exigentes en el apartado estético, y para los que busquen más personalización.
Las principales modificaciones son aerodinámicas: Frente al Focus básico, el paquete Ford Focus Sport añade un spoiler trasero, llantas de aleación de 17 pulgadas, líneas laterales de la carrocería cromadas, pinzas de freno en color rojo y faldones por los cuatro costados del coche.
Por otro lado, partiendo del equipamiento del acabado Trend, el Focus Sport añade faros antiniebla delanteros y retrovisores térmicos, mientras que dentro cuenta con los correspondientes asientos deportivos, además de reposabrazos en la consola central, freno de mano en forma de Z y un equipo de sonido con conexiones USB y manos libres con Bluetooth V2C (controlado mediante la voz).
Para el Focus Sport podrá elegir entre cuatro motores: En gasolina, los 1.0 o 1.6 EcoBoost de 125 y 180 CV respectivamente, mientras que las opciones diesel son el 1.6 TDCi de 115 CV o el 2.0 de 163.
Ford Focus Sport 1.0 EcoBoost (125 CV): 19.750 euros
Ford Focus Sport 1.6 EcoBoost (180 CV): 22.050 euros
Ford Focus Sport 1.6 TDCi (115 CV): 21.050 euros
Ford Focus Sport 2.0 TDCi (163 CV): 23.050 euros