Es uno de los fraudes más comunes que utilizan los conductores en Nueva York para saltarse los radares

Hace unas semanas te contábamos cómo en la ciudad de Nueva York (EE.UU.) uno de los fraudes más extendidos era saltarse los peajes instalados en diferentes puntos de la ciudad. A este respecto, se realizó una operación con hasta 44 detenidos y cuya cuantía por no pagar ascendía a un millón de euros.

Así las cosas, la ciudad estadounidense ha vuelto a ser noticia por una serie de fraudes que tienen que ver con los controles de velocidad. Es sabido que una de las soluciones más comunes para evitar los radares es emplear matrículas falsas.

Y esto se debe a que las cámaras instaladas en Nueva York no son capaces de identificar si la matrícula en cuestión es falsa o no, por lo que este tipo de fraudes se tienen que corroborar con agentes de la policía de la mencionada ciudad. Como indican los compañeros de Carscoops, en 2023 se descartaron más de un millón de multas por exceso de velocidad debido a que los conductores en cuestión empleaban matrículas falsas para librarse de la multa.

Hace varios meses, se instalaron varias cámaras para controlar la velocidad en diferentes puntos de la ciudad. Como resultado, los accidentes de tráfico han disminuido, al tiempo que la picaresca de los conductores ha aumentado en forma de fraudes. Las alarmas saltaron cuando un estudio destacó la imposibilidad de las cámaras de reconocer las matrículas falsas. Volviendo a la información vertida por Carscoops, la no aplicación de ese más de un millón de multas por exceso de velocidad supondría más de 100 millones de euros en sanciones.

Si quieres un coche nuevo con descuento, haz click aquí

Fraudes Nueva York matriculas falsas controles de velocidad

Nueva York se defiende de los fraudes: sólo se han evitado el 22 % de las multas

El citado estudio intenta poner calma; y es que a pesar de una cifra astronómica, estos fraudes sólo representan el 22 % de las infracciones por exceso de velocidad comprendidos entre enero y junio de 2023. Más concretamente, 320.000 casos corresponden a matrículas ocultas, mientras que los 740.000 restantes fueron por matrículas falsas, esto es, copias realizadas por los conductores a través de Internet que no pueden ser reconocidas por las cámaras de vigilancia.

Aunque es probable que esta situación no mejore en los próximos meses. Las autoridades pertinentes de Nueva York ya están al tanto, indicando que el uso de matrículas falsas ha aumentado notablemente desde 2019. Por eso mismo, no es de extrañar que se actualicen las cámaras, así como una campaña de vigilancia por parte de los agentes de policía centrada en la detección de estos fraudes.