Después de casi 4.000 kilómetros pedaleando por las carreteras francesas, el británico –nacido en Nairobi (Kenia)–, Chris Froome, se adjudicó la victoria en la centésima edición del Tour de Francia, por lo que, tras la carrera, fue convenientemente agasajado. Aparte del homenaje de público y autoridades –que siempre es de agradecer– el británico se embolsaría aproximadamente medio millón de euros por la victoria final, más 10.000 por cada victoria de etapa –este año ha logrado 3–, si no fuera porque en el ciclismo estos premios suelen distribuirse a partes iguales entre todos los componentes del equipo.
A demás de estos mpremios en metálico y la astronómica ficha que cobra el ciclista británico de su equipo, el Team Sky, ha recibido un premio en especie que seguro le hará ilusión: un Jaguar F-Type con una decoración personalizada.
¿La razón de este regalo? Sencillo, el fabricante británico es patrocinador del Team Sky desde 2010 y aporta los veh´ciulos que son utilizados como coches de apoyo durante las carreras. Así, en 2010 cedieron varias unidades del X-Type y, desde 2012, utilizan los XF-Sportbrake.
Jaguar ha elegido una banda amarilla –color del maillot del ganador del Tour– en el capó para decorar este F-Type, donde además se ha incluido una selección de las fotografías que se enviaron vía Twitter para participar en una campaña de apoyo al Team Sky que organizó jaguar durante el Tour.
