El Ejecutivo de Pedro Sánchez ha puesto la primera piedra en el camino hacia una ley de cambio climático y transición energética. Un texto en el que ya estaría trabajando el Ministerio para la Transición Ecológica y que llegaría antes de que acabara el año al Congreso. Dicho Ministerio ya ha trasladado a los principales partidos políticos un documento en el que se recogen varias normas. Entre ellas, la prohibición de las ventas de vehículos diésel y gasolina a partir de 2040.
Asimismo, para 2050 el Gobierno tiene la intención de colaborar con los Ayuntamientos para prohibir que cualquier vehículo contaminante pueda circular por la ciudad, aunque son conscientes de las particularidades de cada municipio. Otra de las medidas recogidas en este documento es la obligación de instalar puntos de recarga eléctricos en la red de gasolineras españolas, ofreciendo diferentes plazos de instalación en función del volumen de ventas de cada negocio.
Objetivos de esta medida
El objetivo fijado por el Gobierno es que para 2030 las emisiones de España sean de 230 millones de toneladas de CO2, ya que, actualmente, nuestro país tiene unas emisiones de 339 millones de toneladas de CO2. Esta ley tendrá que ser negociada en el Congreso. Una medida que podría tardar en llegar dado que el PSOE no dispone de la mayoría absoluta.
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