
Fernando Alonso se muestra optimista ante la próxima carrera a pesar del pésimo resultado en Malasia y de que la FIA declarase legales los polémicos difusores que utilizan los equipos Brown, Toyota y Williams y que les ha permitido dominar el Campeonato.
Entrevista Fernando Alonso
El Gran Premio de Malasia fue una carrera complicada… Háblanos sobre ello.
Hice una muy buena salida y pasé de la novena a la tercera posición tras un par de curvas, lo que demostró la efectividad del sistema KERS. Pero iba muy cargado de combustible y me fue muy difícil defender mi posición con respecto a los coches que venían por detrás.
Después comenzó a llover y me salí de la pista antes de poder colocar los neumáticos para mojado. A partir de ahí se trataba de montar los neumáticos adecuados en el momento exacto, pero no era nada fácil predecir con qué intensidad iba a llover en cada momento. Creo que la decisión de suspender la carrera fue la acertada, ya que habría sido muy peligroso seguir en esas condiciones.
Has comentado que el equipo necesita mejorar el coche. ¿Confías en que pueda hacerlo?
Totalmente. Creo en este equipo. El año pasado ya comprobamos que sabe cómo trabajar para volver a estar delante y sacar el máximo rendimiento posible del coche. La temporada acaba de comenzar y todos los miembros del equipo están trabajando duro para desarrollar el R29 y que sea más competitivo en las próximas carreras. Acabé algo decepcionado en Malasia al no poder puntuar, ya que mi objetivo es sumar puntos en todas las carreras de la temporada.
Obviamente es complicado cambiar el coche antes de regresar a Europa, pero hemos aprendido mucho en las dos primeras carreras de la temporada e hicimos progresos en Malasia. En Shanghai debemos dar otro paso adelante y espero poder puntuar.
¿Qué te parece el circuito de Shanghai?
Es un circuito que me gusta, bastante similar al de Sepang, con algunas curvas rápidas, largas rectas y algunos sectores lentos. Hay que encontrar un buen equilibrio en la puesta a punto para poder contar con la suficiente adherencia en las zonas más rápidas, pero también con una buena punta de velocidad en recta. Ya gané allí en 2005 cuando Renault también ganó el Campeonato del Mundo de Constructores, así que es un circuito de muy buenos recuerdos para todo el equipo. China también es un país que me gusta y sus aficionados son muy entusiastas con la Fórmula Uno.
Cómo es el circuito
El Circuito Internacional de Shanghai cuenta con las instalaciones más modernas e impresionantes del calendario del Mundial. Como la mayoría de los circuitos diseñados por Hermann Tilke presenta una amplia variedad de curvas, tanto rápidas como lentas, así como también una larga recta seguida por una curva cerrada que ofrece una oportunidad ideal para intentar adelantar.
A nivel técnico el circuito es muy exigente tanto para pilotos como para ingenieros, en especial la primera curva, que parece no terminar nunca y que prácticamente obliga a los coches a trazar un círculo completo.
Aerodinámica
Como sucede en otros circuitos modernos, el de Shanghai incluye una combinación de curvas de alta velocidad y largas rectas que obliga a encontrar un equilibrio aerodinámico para poder defender la posición en las rectas, pero sin comprometer por ello la adherencia del coche en las curvas. Las curvas 7 y 8 son dos de los virajes de alta velocidad que llevan hacia una doble curva lenta a izquierdas, los virajes 9 y 10.
Suspensión
En el aspecto mecánico será importante encontrar el compromiso adecuado que le permita al piloto contar con la confianza necesaria en su coche a lo largo de una distancia de carrera. Shanghai es un circuito que te obliga a realizar fuertes frenadas, que cuenta con algunas curvas de alta velocidad y con muchas fases de aceleración.
Combinado con un número de cambios de dirección en alta y baja velocidad, eso implica que normalmente la suspensión sea algo más rígida para que el coche sea más reactivo en la parte delantera, mientras que por detrás se suaviza para obtener una buena tracción y estabilidad en la frenada.
En particular, nos concentramos en intentar hacer el coche estable en frenada y en las aceleraciones, ya que muy a menudo el piloto tiene que girar frenando y acelerando de forma simultánea, como por ejemplo en las curvas 1, 2 y 8.
Neumáticos
En términos generales podríamos decir que el de Shanghai es un circuito duro para los neumáticos. No sólo los delanteros soportan una tremenda exigencia en virajes como la curva 1 (delantero izquierdo), 7 (delantero derecho) y 8 (delantero izquierdo), sino que las numerosas curvas lentas implican que los neumáticos traseros también deban trabajar mucho en la tracción.
La curva 1 en particular es muy exigente con los neumáticos debido a que se va estrechando progresivamente.
La curva 13 también merece mención especial, ya que el neumático delantero izquierdo soporta una tremenda carga en esta curva de 270°, mientras los neumáticos traseros también sufren unas tremendas cargas laterales y longitudinales.
En cuanto a los compuestos, Bridgestone ha seleccionado para esta carrera el súper blando y el medio, como ya hiciera en la primera carrera de la temporada en Melbourne.
Rendimiento del Motor
Shanghai no es un circuito especialmente severo con el motor, ya que tan sólo el 55% de la vuelta se completa con el acelerador pisado a fondo. Sin embargo, con la larga recta de atrás, una buena punta de potencia es importante para llegar a la curva 14 con opciones de poder adelantar.



