
En su corazón sigue latiendo el mismo propulsor de cuatro cilindros, procedente de la CBR, en el que se ha trabajado para aumentar su relación de compresión (de 11,0:1 a 11,2:1), mejorándose la entrega de potencia a medio régimen, que es donde más se utiliza. Cuenta con un sistema de inyección electrónica PGM-FI, desarrollado por la firma, con mariposas de 36mm e inyectores de 12 surtidores, que ayuda a reducir considerablemente el consumo de carburante. Por otro lado estrena un nuevo sistema de escape realizado en acero inoxidable, más pequeño y ligero al integrar el pre-catalizador en el codo del escape y el catalizador en el silencioso.
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