El indio Narain Karthikeyan será quien le ceda el asiento durante una hora y media a Ma Qing Hua para poder demostrar de lo que es capaz, lo que significa que pilotará el chasis F112-03 del equipo y lucirá el número 23.
No se puede decir que Ma Qing Hua no esté preparado para el reto de una sesión oficial: Con el programa de desarrollo que HRT preparó para él, ha estado entrenándose en el gimnasio, subiéndose al simulador y disputando pruebas de otras categorías, tal y como explica el propio piloto: «Lo afronto con ilusión y tranquilidad porque he estado entrenando duro en los últimos meses para estar preparado cuando llegara la oportunidad. También he trabajado con el simulador para conocer un poco mejor los circuitos y cómo reacciona el coche de Fórmula 1. En estos meses acompañando al equipo a los Grandes Premios también he aprendido mucho de los ingenieros y de mis compañeros, que han compartido información y toda su experiencia, lo que me será de gran utilidad».
Pero su experiencia más valiosa fue la oportunidad de subirse previamente al HRT en los entrenamientos para jóvenes pilotos en Silverstone, celebrados en julio. En ellos, Ma Qing Hua completó 483,062 km, una distancia que le valió para lograr la superlicencia de la FIA, necesaria para correr en un fin de semana de Gran Premio.El jefe del equipo HRT, Luis Pérez-Sala, no tiene dudas sobre las capacidades de Ma Qing Hua: «Desde que empezamos a trabajar con él en marzo, todo ha ido muy deprisa pero ha ido respondiendo y superando cada fase como correspondía. Desde las pruebas con monoplazas tipo World Series y GP2, pasando por las sesiones en simulador, hasta el entrenamiento con el Fórmula 1 en Silverstone, donde completó 500 km sin problemas. Nos ha demostrado que está a un buen nivel y transmitido la confianza necesaria para dar el siguiente paso que es el de debutar en un entrenamiento libre de Gran Premio».