El Jaguar F-Pace comenzó a venderse en 2016. Ha sido un lanzamiento crucial para la compañía, que entraba, con este modelo, en el mercado de los SUV por primera vez en su historia y conseguía en unos pocos meses ser, de largo, el modelo más vendido de la marca británica. Ahora, cuatro años más tarde, le ha llegado el turno de la renovación, con interesantes cambios que afectan al exterior, al interior y a la gama de motores.
Por fuera, los cambios son los habituales: faros, parrilla, parachoques y llantas. También se modifica el capó, con nuevas nervaduras, y se ofrece la línea de equipamiento R-Dynamic, caracterizada, entre otras cosas, por el aspecto más deportivo de algunas de estas piezas.
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En el interior, directamente vamos a encontrar un salpicadero rediseñado en el que una gran pantalla central de 11,4 pulgadas toma el protagonismo y permite gobernar la interfaz Pivi, igualmente nueva. Destacan también los nuevos paneles de las puertas, en los que se reubican los mandos de los elevalunas (que hasta ahora se localizaban en el marco de la ventanilla), posicionados a partir de ahora en la zona del reposabrazos.
Asimismo, el renovado Jaguar F-Pace estrena un selector del cambio de nuevo diseño, y sus asientos son igualmente nuevos e introducen la posibilidad de contar con programas de masaje inéditos y con sistemas de calefacción y refrigeración mejorados.
Nuevos motores para el Jaguar F-Pace
Pero los cambios más importantes en el SUV de Jaguar se encuentran bajo el capó, que ofrece tres motores diésel y dos de gasolina, todos ellos de la familia modular Ingenium. Entre los primeros hay dos versiones sobre el bloque de dos litros y cuatro cilindros, con 163 CV y 204 CV, mientras que el más potente es un seis cilindros 3.0 de 300 CV. Por su parte, en gasolina encontramos el 2.0 tetracilíndrico con 250 CV y el 3.0 hexacilíndrico con nada menos que 400 CV. La mayor novedad, no obstante, viene de la mano del 2.0 de gasolina asociado a un motor eléctrico y una batería de iones de litio de 17,1 kWh recargable en la red. Este Jaguar F-Pace PHEV entrega una potencia máxima combinada de 404 CV y dispone de un potente cargador embarcado de 32 kW que permite recargar el 80 % de la capacidad de la batería en solo media hora. Gracias a su sistema híbrido enchufable, ofrece una autonomía en modo 100 % eléctrico de 53 kilómetros.
Todos los motores van montados en posición longitudinal y asociados a una caja de cambios automática ZF de 8 velocidades a cuya salida se acopla una caja tránsfer de una única relación que envía el par de forma permanente a las cuatro ruedas. Al modelo menos potente de gasolina le corresponde el distintivo medioambiental C, el PHEV obtiene la etiqueta Cero, y el resto de la gama dispone de un sistema de hibridación ligera y de la correspondiente etiqueta Eco.
Los precios de la gama arrancan en 59.944 euros para el diésel de 163 CV con acabado Standard. La versión 2.0 de gasolina con el mismo acabado parte de los 66.759 euros. Y el PHEV más asequible está disponible por 73.000 euros.
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