Javi Villa prueba el BMW Z4M

De hecho, a diario utilizo un M3 E36 y, por eso, cuando me llamaron mis colegas de Autofácil para probar el Z4 M en su versión coupé -sucesor del Z3 M Coupé de 2000-, no lo dudé ni un instante: se trata, sin duda, de uno de los biplaza más apasionantes de conducir que se pueden adquirir por menos de 70.000-.

Por dentro y por fuera

1.- El volante multifunción es de serie.

2.- Las costuras del volante llevan los colores de BMW Motor-sport.

3.- Los indicadores luminosos del cuentarrevoluciones indican el régimen máximo recomendado.

4.- La palanca de cambio es idéntica a la del resto de la gama, con la única diferencia de incluir el logotipo ‘M’… que está iluminado.

5.- El enorme capó cuenta con dos amortiguadores telescópicos para

su sujección.

6.- Los asientos de cuero están disponibles en cuatro colores, a elegir sin sobreprecio, y en otros dos como opción -2.229e-.

7.- El climatizador de una sola zona es de serie.

8.- El botón Sport varía la gestión electrónica del motor, y mejora la respuesta al acelerar.

9.- Los botones de los elevalunas quedan muy bajos.

1.- Un bonito detalle: los intermitentes laterales van ocultos tras el escudo de BMW.

2.- Esta versión ‘M’ también se distingue por las cuatro salidas de escape.

3.- Hay hasta cuatro logotipos de BMW distribuidos por la carrocería; éste es el del frontal.

4.- Las llantas de 18″ con cinco radios dobles son de serie… y las únicas disponibles para esta versión.

5.- Los faros bixenón y los antiniebla vienen de fábrica.

6.- Los retrovisores -idénticos a los del resto de la gama Z4- incluyen plegado eléctrico de serie.

7.- La tercera luz de freno va integrada en el portón y queda algo baja; sobre ella, hay un discreto alerón.

8.- En el hueco de la derecha se alberga el kit antipinchazos, que resta 20 litros al maletero; el resto de Z4 Coupé equipan neumáticos Run Flat, capaces de rodar sin aire 200 km sin superar los 80 km/h.

CONDICIONES-DE-LA-PRUEBA Y DEL VEHÍCULO

Km al inicio: 14.198 km Temperatura ambiente: 12º C Presión atmosférica: 890 mbar Peso en báscula: 1.550 kg aprox. Reparto del./tras.: 50/50% Neumáticos: Continental SportContact 3 (225/45 ZR18/ 255/40 ZR 18) Presión del./tras.: 2,3/2,5 bar.

Curva de potencia: Muy progresiva y sin altibajos hasta 6.500 rpm, donde se estabiliza.

Curva de par: Impresionante: a sólo 2.000 rpm, ya dispone de más de 30 kgm.

Medidas

No tan pequeño… El Z4 M ofrece un habitáculo con suficiente espacio para que dos adultos puedan viajar cómodamente; eso sí, un Porsche Cayman le supera, especialmente en altura. El maletero, con 245 litros, pierde 40 litros con respecto al resto de Z4 Coupé debido a la presencia de la batería y del kit antipinchazos.

Aceleración

Bien, pero… En nuestras mediciones, el Z4 M ha resultado ser bastante más lento de lo anunciado por el fabricante, especialmente en la prueba del 0-1.000 metros. En el 0-100 km/h, obtiene medio segundo más que la cifra oficial.

Consumo

No es un ‘TDi, pero… El motor 3.2 de seis cilindros siempre se ha caracterizado por una buena relación prestaciones-consumo … y el Z4 M no es una excepción. La parte negativa es que, debido a un depósito muy pequeño, la autonomía es limitada.

Adelantamiento

Muy veloz… La excelente respuesta del motor a cualquier régimen permite unas recuperaciones realmente notables, más aún tratándose de un motor sin turbo; eso sí, para disfrutarlo en su máxima ‘plenitud’, hay que llevarlo por encima de 5.000 rpm. Frente a su máximo rival, el Porsche Cayman S, el Z4 es más rápido en 3ª y 4ª, cediendo en las últimas dos marchas.

Sonoridad

Hace ruido, pero… ¿y qué? El ruido que llega al interior del BMW es elevado en cualquier circunstancia, aunque se hace más patente al superar las 4.000 rpm… y se convierte en un ‘bramido’ al superar las 5.500 y hasta el corte de inyección, situado a 8.000 rpm. Tanto el ruido aerodinámico como el de rodadura son muy contenidos.

Frenada

Estaban ‘en rodaje’ Los frenos de nuestra unidad de pruebas apenas estaban rodados, lo que explica en parte que las distancias de frenado sean bastante largas; tras varias frenadas, notamos cierta mejora… aunque también pudimos constatar la poca resistencia al calentamiento que ofrecían, y eso que cuenta con discos ventilados en ambos ejes.

Qué debes saber de…

Quién es…Este asturiano es, a sus 19 años, una de las grandes promesas del automovilismo en España y uno de los favoritos para ser el sucesor de Alonso.

En su segundo año en la GP2, antesala de la F1, se ha convertido en el primer español en ganar, de momento, tres carreras: Magny Cours -Francia-, Nürburgring -Alemania- y Hungaroring -Hungría-.
Su palmarés Fue tercero en el Campeonato de España de F3 en 2005; un año antes, se había impuesto en la Copa de España Junior de F3.

Curiosidades Es aficionado a la mecánica -ha trabajado como asistente en un equipo de rallyes-. Tiene su propia web: www.javiervilla.com

¿Pequeño?

Pues sí: a pesar de su ‘interminable’ capó, el Z4 mide sólo 4,11 metros de largo: menos que un Renault Mégane -4,20 m-; pero, lo que le hace especial es su reducida altura -1,29 metros- y, en contraste, su generosa anchura: 1,78 metros.

Esta versión ‘M’ se diferencia por las llantas de 18″ -la única medida disponible para esta versión-, los paragolpes exclusivos y, como no, la cuádruple salida de escape.

Por otra parte, uno de sus defectos es el acceso -y no digamos la salida- al interior: como es un modelo bajito y el asiento está casi a ras de suelo, acaba siendo un tanto incómodo en el uso diario;-eso sí, una vez acomodado en la butaca del conductor -magnífica por sujeción, forrada en cuero y con reglajes eléctricos de serie; igual que la del copiloto-, la postura es perfecta, muy parecida a la que se tiene en un coche de competición, con las piernas muy estiradas.

Como contrapartida, la visibilidad es escasa en todas las direcciones, lo cual resulta contraproducente al circular por ciudad.

En cualquier caso, todo esto no deja de ser algo secundario en un vehículo pensado para disfrutar de la conducción, y para ello dispone de un volante forrado en piel con un grosor y un diámetro idóneos.

La calidad es tan buena como en otros BMW, y el diseño general es idéntico al de cualquier Z4, a excepción del logotipo ‘M’ presente en la instrumentación, el volante, la palanca de cambio y los umbrales de las puertas.

¿Y qué tal de espacio? Pues, suficiente para que dos adultos quepan sin estrecheces; además, cuenta con huecos en las puertas y otro con tapa entre los respaldos de los asientos… algo que se agradece en un deportivo. El maletero quizá se queda corto para dos ocupantes: 245 l.

Llega el turno de comprobar si el Z4 M es un ‘deportivo’ con todas las letras. Giro la llave de contacto y… ¡esto empieza bien!

El sonido bronco que emiten los escapes pone ‘los pelos de punta’. Piso el pedal del embrague, inserto la primera velocidad, y giro el volante para abandonar el aparcamiento… una maniobra que, debido a la dureza de accionamiento de estos tres elementos, requiere mayor esfuerzo que en un turismo convencional.

Está claro que, por sonido y ‘tacto’ general, este modelo es un auténtico deportivo.

¿Cumplirá también en una carretera de montaña? Durante los primeros kilómetros conduzco sin desconectar el control de estabilidad DSC; así, el Z4 M es un deportivo muy sencillo de conducir, ya que cualquier ‘exceso’ con el acelerador lo solventa rápidamente este sistema.

Segunda fase: desconecto el DSC -para ello, hay que pulsar un pequeño botón rotulado con estas siglas-… y, entonces, aparece ‘la bestia’.

Hay que tener mucho tiento con el acelerador para no terminar ‘de lado’ a la salida de cada curva… y eso que el eje trasero cuenta con unos anchos y ‘pegajosos’ neumáticos de 255 mm -los delanteros son más estrechos: 225 mm-; al menos, para controlar el derrapaje y sacar el máximo partido a los 343 CV disponemos de la ayuda de un diferencial autoblocante -de serie-.

En cualquier caso, el Z4 pone mucho de su parte: tiene un reparto de pesos perfecto, la carrocería apenas balancea, la dirección es precisa e incluso demasiado sensible… Es, en definitiva, un BMW: ir rápido con él siempre te exige ‘algo más’ que en cualquier coche….

Tampoco hay que olvidar que, bajo su inmenso capó, el Z4 M cuenta con un seis cilindros en línea de 3.2 litros que, aunque no lleva turbo, desarrolla 343 CV.

En la práctica se trata de un propulsor capaz de alcanzar 8.000 rpm -entrega la potencia máxima a 7.900 rpm-… pero con una respuesta impresionante a cualquier régimen; puedes insertar la sexta rodando a 60 km/h -entonces el propulsor funcionará a sólo 1.500 rpm-, acelerar a fondo y sentir cómo ‘coge velocidad’ con rapidez y sin dar ningún tirón.

Impresionante.

Además, si activamos la función Sport -pulsando un botón junto a la palanca de cambio- la respuesta del acelerador es aún más rápida.

Evidentemente, el coche es ‘un tiro’: llega a 100 km/h en cinco segundos… aunque con su potencial, la velocidad máxima limitada a 250 km/h parece un contrasentido.

¿Perfecto?

La verdad es que no; los frenos dan síntomas de agotamiento tras varias frenadas fuertes debido, en gran parte, a que el Z4 M no es presisamente una ‘pluma’ -pesa 1.495 kg-

.Salimos de la zona virada y enlazamos con la autovía, aquí también se comporta como un deportivo… pero, para lo malo. Resulta incómodo, sobre todo por culpa de una suspensión bastante rígida -y 10 mm más baja que la de un Z4 normal- y, en general, es bastante ruidoso.

No es el más adecuado para largos viajes…

En conclusión, el Z4 M es digno merecedor de la calificación de deportivo. ¿Y en cuanto a economía? Cuesta 65.500-, un precio razonable para su potencia -su principal rival, el Porsche Cayman S de 295 CV, vale prácticamente lo mismo: 65.510-, pero está menos equipado- y su consumo, en conducción diaria, no sobrepasa los 12 l.

De nuevo, BMW Motorsport ha creado un excelente deportivo, capaz de enfrentarse sin complejos a todo un Porsche Cayman S. Si he de destacar algún apartado, sin duda, me quedo con el motor: es todo un veterano -data del 2001- pero aún impresiona por empuje, progresividad, respuesta a altas revoluciones.

¿Defectos del Z4 M? Como coche para usar a diario o para viajar me parece incómodo y con limitaciones; además, por 18.700- menos tienes un Z4 Coupé 3.0si de 265 CV que también va ‘de fábula’.

Por 2.500- más lo tienes cabrio…Con techo de lona y 220 litros de maletero. ¿Su precio? 68.000-uros.

Un motor premiado…El propulsor del Z4 M es el mismo que empleaba el anterior M3, lanzado en 2001; desde entonces, ha obtenido el Engine of the Year* como mejor motor en la categoría de entre tres y cuatro litros.

Que lleva el BMW Z4 M Coupé…Cuatro airbags, control de estabilidad, ABS, control dinámico de conducción FDC, diferencial autoblocante, faros bixenón, climatizador, asientos deportivos de cuero eléctricos, dirección asistida variable, elevalunas y retrovisores eléctricos, cierre centralizado con mando a distancia, equipo de audio con CD, ordenador de a bordo, tapicería de cuero… Opciones: Navegador (desde 1.300-), sistema Hi-Fi Professional (1.238)…