José Luis Martín prueba el Toyota Yaris híbrido

Nuestro Toyota Yaris sigue su andadura con los lectores de Autofácil en el norte de España. En esta ocasión, con lectores de Gijón y Santiago de Compostela.


El entorno natural del Yaris es claramente la ciudad, en la que jugando con la alternancia entre el motor eléctrico y el térmico, y siempre que no se pise demasiado el acelerador, se logra un consumo bastante razonable.

José Luis Martín

►Tiene 58 años ► Es de Santiago de Compostela ► Profesión: Funcionario ► Primer coche: Simca 1200 ► Coche actual: Honda CRV

Además, su comedido tamaño le permite aparcar en cualquier hueco y su gran visibilidad permite controlar el perímetro perfectamente. Mención especial para la cámara trasera, que facilita enormemente la maniobra de aparcar.

El equipo de iluminación me parece bastante bueno, ya que aporta un punto más a la seguridad tanto pasiva como activa. Tanto las luces diurnas como las luces de ciudad y carretera animan a conducir sin temor ya sea por la noche o por una espesa niebla.

Me han gustado mucho los neumáticos de invierno que monta esta unidad del Yaris. En Santiago llueve con frecuencia, y en este caso, me han permitido circular por carreteras bien cubiertas de agua sin que ello perjudicase en ningún momento a la seguridad abordo.

urante mi semana de pruebas no ha hecho mal tiempo como para probar los neumáticos de invierno. Lo que si he notado es que a alta velocidad no ofrecen el mismo comportamiento que unos ‘normales’ ya que la carcasa del neumático resulta más blanda pero en ningún momento el agarre resulta malo por lo que apenas notas que son de invierno.

«Un navegador muy completo»

«Llama la atención»

«Perfecto para una conducción tranquila»

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