A partir
de entonces, se producen de forma
intermitente unas extrañas pérdidas de
potencia, sobre todo cuando demando
algo más de fuerza para realizar un
adelantamiento o subir alguna pendiente.
En la instrumentación no se enciende
ningún testigo de avería y en el taller oficial
lo -enchufan- a sus ordenadores,
pero como no aperecen códigos de avería,
me dicen que no pueden hacer nada
porque no saben qué es lo que falla.
Además, en el servicio oficial tardan nada
menos que 15 días en darme una cita, y
lo peor es que empiezo a circular con
miedo a que me deje tirado o provoque
un accidente. ¿Podéis ayudarme?
El departamento
de comunicación de Kia nos ha
asegurado que se han efectuado todo tipo de
comprobaciones en la inyección, centralita… del
Picanto de Sergio y no se ha detectado anomalía
alguna. También, el jefe de taller ha probado el
vehículo en varias ocasiones y no ha apreciado
ninguno de los problemas mencionados.