
La mecánica escogida por Kia para el Quoris es un motor 3.8 V6 de 290 CV, asociado a un tren de potencia con propulsión trasera. Entre el equipamiento encontramos elementos tecnológicos nunca antes vistos en Kia, como el control de crucero inteligente mediante radar: Éste se aloja en la parte derecha del parachoques delantero, y es capaz de controlar una distancia de hasta 174 metros. Gracias a él, el Quoris supervisa la situación del tráfico y mantiene la distancia de seguridad con el coche de delante. El vehículo elige entre cuatro niveles de aproximación -los cuales pueden ser activados manualmente por el conductor: 52, 40, 32 y 25 metros a una velocidad constante de 90 km/h-, y puede llegar a detenerse autónomamente.
Al mismo tiempo, el sistema de gestión de seguridad del vehículo detecta tres niveles de riesgo de colisión: En el primero, el nivel bajo, el coche advierte mediante un testigo en el cuadro de instrumentos y en el «Head Up Display» del parabrisas; el segundo nivel añade una alerta acústica y activa los pretensores de los cinturones, apretándolos más. En el nivel máximo, el Quoris acciona los frenos por sí solo.
A estos dispositivos se suman el sistema de Detección de Ángulo Muerto -que funciona por encima de los 30 km/h y alerta al conductor con el encendido de un triángulo amarillo en el retrovisor y una señal en el Head Up Display si anticipa que puede haber una colisión pasados 4,5 segundos-, así como el 0., que funciona cuando se superan los 60 km/h. Por debajo de 20 km/h, se activa el sistema de control periférico, con le que recibimos las imágenes de cuatro cámaras en el sistema de infoentretenimiento, para mayor comodidad en el aparcamiento y las maniobras.