La medida por fin ha sido adoptada por la DGT y contribuirá a luchar contra la manipulación de los cuentakilómetros, aportando mayor transparencia a la compraventa de vehículos. Hasta ahora, y desde principios del 2013, este dato sólo se controlaba por las ITV, que lo enviaban a la DGT, que lo incluía en el informe del vehículo.
A partir de ahora este dato de kilometraje se anotará también en el permiso de circulación, de forma que al transferir un coche figurará en el los kilómetros que tiene reales, dificultando así los delitos de trucaje en el cuentakilómetros.
Ganvam, la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, es la primera en celebrar esta decisión: la manipulación de los cuentakilómetros es una acto delictivo, penado como estafa con hasta seis años de cárcel que se realiza para aumentar el valor de un coche. Según esta asociación no es, ni mucho menos, una práctica generalizada en el sector, que se considera una víctima más de este delito, por la mala imagen e incluso competencia desleal que supone para la mayoría de los comerciantes del sector.
Otra consecuencia de esta picaresca, según Ganvam, perjudica a la seguridad vial: si el conductor de un coche tiene una idea equivocada sobre el kilometraje de su vehículo, ¿cómo va a ser capaz de realizarle el mantenimiento correcto? Por ello, este trucaje pone en riesgo la seguridad del conductor, sus acompañantes y otros usuarios de la carretera.
Pero para Ganvam todavía hay que ir más lejos y piden que este tipo de actuaciones se incluyan en la Ley de Seguridad Vial y, además de las consecuencias penales que pueda tener, sea sancionada administrativamente. Dice Juan Antonio Sanchez Torres, presidente de Ganvam: «seguimos insistiendo en que se incorpore esta acción delictiva en futuras modificaciones de la normativa, algo que no se llevó a cabo en la última Ley de Seguridad Vial de mayo del año pasado, a pesar de la importancia de proteger al consumidor y, especialmente, de garantizar unas carreteras más seguras».