Desde Autofácil y TodoTerreno hemos ofrecido a nuestros lectores la posibilidad de disfrutar de un vehículo todoterreno durante las vacaciones. Finalmente, estos han sido nuestros ganadores que han conducido un Ford Kuga y Un Mitsubishi Montero, respectivametne durante el pasado mes de agosto. Éstas son sus experiencias:
Ford Kuga Titanium 2.0TDI 136CV 4WD 5 puertas
María Luisa Mansell, 46 años, secretaria, mi primer coche un Peugeot 205, mi coche actual un Opel Vectra V6, 3.0
Viaje: Madrid, Ferrol, Puentedeume, Santiago de Compostela, Coruña, Valença do Minho (Portugal), Vigo. Total 2.455 Kms recorridos, 195,83 litros de diesel, promedio 7,98 litros/100 Kms.
Es un coche con un comportamiento fantástico en carretera, fuera de ella es capaz de subir pronunciadas pendientes, sin perer tracción, aun cuando se trate de una pista de arena o incluso grava. Esto lo experimenté al subir y bajar por una pista forestal la cual tenia una pendiente parecida a la de una montaña rusa.
No tiene llave para abrir las puertas ni para arrancar el motor, ya que las primeras se desbloquean al acercarnos y tirar del tirador de la puerta y el motor comienza a funcionar al pulsar un botón de arranque.
La tapicería es muy bonita y sus asientos son muy confortables. Al estar más alto que en un turismo normal se ve muy bien la carretera. La conducción de noche es muy agradable gracias a sus faros de xenón, una vez llegado al destino, al abrir las puertas, se ilumina el suelo del habitáculo y afuera donde vamos a pisar, gracias a sus luces de cortesía instaladas en sus retrovisores plegables.
Es un coche que es agradable de conducir pues reúne una serie de comodidades como el automatismo de luces, control de velocidad, sensor de lluvia, retrovisor interior que se obscurece automáticamente y un interesante control por voz que gestiona el navegador, radio, CD, USB, etc. Junto al volante existen los mandos necesarios para poder activar lo anteriormente expuesto sin apartar las manos del mismo.
Gracias a sus sensores de aparcamiento y cámara trasera es fácil aparcar incluso en sitios muy reducidos de maniobra.
A mejorar
Solo habría una cosa a mejorar, sería la pantalla central, la cual es difícil de ver cuando incide el sol en ella. Su maletero tal vez un poco justo. En conclusión, me lo compraría pues me ha gustado mucho.
Mitsubishi Montero 5P 3.2 DI-D Motion A/T 200 CV
Santiago López Álvarez, 38 años, Jefe de Proyecto CPD-s, mi primer coche Renault 14, mi coche actual Renault Laguna Gran Tour.
Con el Montero recorrimos 3.000 km. Desde Madrid, a La Coruña, Santiago de Compostela, Playa de Otur (Asturias), Cangas de Narcea, Luarca, Oviedo, Cudillero, (Asturias) Comillas, Santander, Bilbao y San Sebastián.
Lo primero que impacta es la altura del Montero, la visibilidad sobre la carretera es inmejorable y produce una sensación agradable en su conducción. Después te impacta su robustez y seguridad. El espacio interior es suficiente para una familia numerosa como la nuestra y se agradece la versatilidad de sus siete plazas. Viajaron cómodamente los tres niños con sus correspondientes sillas en el asiento posterior.
La caja de cambios al ser automática permite una conducción sencilla y cómoda, quizá el único inconveniente es que sólo tiene cinco velocidades, cuando las cajas más modernas ya llevan seis, siete y hasta ocho velocidades, pero su comportamiento es notable. El cambio es rápido y preciso y para conducir por carreteras de montaña o pistas se agradece el cambio secuencial.
Su comodidad interior, la visibilidad y la respuesta en cualquier terreno hace que viajar en él sea disfrutar de cada kilómetro, sintiéndote inmerso en el paisaje. Los kms no cansan, se disfrutan. Un todo terreno de los de verdad, tuvo oportunidad de demostrarlo en los prados y caminos de alta montaña asturianos, en fuertes desniveles, dónde sólo se atreven los tractores; en carreteras en obras como la de Luarca-Pola de Allande (Asturias) fue una suerte llevar este vehículo, ya que fue un trayecto lleno de sorpresas. También ofrece buena respuesta en las carreteras en curva, subiendo altas montañas (Santuario Virgen del Acebo en Cangas de Nancea) y también se movió sin problemas por las dunas de la playa de Otur en Asturias.
Al principio pensábamos que iba a ser difícil aparcar porque impresiona su tamaño, pero hemos comprobado que de largo es más o menos como el nuestro un Laguna Gran Tour y que de alto entra en todos los parking subterráneos de ciudades como San Sebastián y Oviedo aunque estaba muy justito al techo. El sensor de aparcamiento se hace imprescindible para guiar un vehículo de estas características en un aparcamiento, necesitaría otro a la altura de la rueda de repuesto para cuando hay obstáculos altos.
Para un vehículo de estas características el consumo no es excesivo una media 11,5 l. /100km. (en carretera y a la velocidad legal).
La capacidad del maletero está muy bien, aunque para una familia numerosa como la nuestra no existe un maletero en el que sobre espacio. Y como casi todos los siete plazas del mercado, cuando utilizas las siete plazas, adiós maletero, se queda bastante reducido. Para adaptarlo a grandes familias, propondría que los asientos de la segunda fila fueran independientes y se pudieran desplazar hacia delante; además los asientos de la tercera fila también deberían ser independientes para poder disponer de maletero en caso de ocupar 6 plazas.
Los asientos de la segunda fila reclinables son ideales para viajes largos con niños, ya que éstos suelen ir durmiendo y les permite mayor comodidad. Su altura interior te proporciona libertad de movimientos y comodidad.
El climatizador de las plazas traseras para los niños es ideal al poder regular la temperatura y velocidad del ventilador de forma independiente, además de disponer de multitud de salidas de aire. También se agradece la capacidad de la guantera entre los asientos delanteros y la posibilidad de desplazar hacia el salpicadero el reposabrazos. Mejoraría el tamaño de la guantera del copiloto para que quepa una botella de agua grande y las guanteras de las puertas más anchas.
Lo que no nos gusta:
Para la ciudad, es un poco más incomodo la apertura de su portón trasero, dificulta su apertura en los aparcamientos en línea, y en batería su rueda de repuesto puede hacerlo sobresalir. El elevalunas del copiloto no es independiente del bloqueo de los elevalunas traseros, por lo que al bloquear los elevalunas de los niños, el copiloto depende de los mandos del piloto.
En definitiva, un gran coche en todos los sentidos, mejorable en pequeños aspectos. Me lo compraría si fuera capaz de poder mantenerlo (su consumo es muy alto) y necesitara de sus prestaciones todoterreno habitualmente.
