Se diría que el insultante dominio de Sebastian Vettel no va a acabar nunca; tal vez la afición esté ya cansada de aferrarse en cada carrera a cualquier pequeño atisbo de cambio en el primer cajón del podio. Pero esto es Canadá: en Canadá no se trata simplemente de confiar en que las características del circuito benefician a tal o cual rival de Red Bull. Canadá es sinónimo de sorpresa. Basta con mirar los resultados históricos en Montreal para darse cuenta.
La de 2010 fue la carrera que cambió la historia de la F1. La rápida y excepcional degradación de los neumáticos Bridgestone dio como resultado un Gran Premio con emoción e incertidumbre. La gente empezó a pedir compuestos menos resistentes para mejorar el espectáculo, y Pirelli escuchó. El resultado es la F1 de 2011. En 2008 vivimos un despiste de Hamilton en boxes: el inglés no vio el semáforo en rojo y embistió a Raikkonen, que estaba esperando a que se pusiera en verde para salir del pit lane. Al final, el podio fue: 1º Kubica; 2º Heidfeld; 3º Coulthard. Y en 2007, ¿quién no recuerda el adelantamiento de Takuma Sato con un Super Aguri a Fernando Alonso con un McLaren? Lo dicho: de verdad que en Canadá todo es posible.
Qué puede pasar
Si queremos apostar por alguien para destronar a Red Bull, elegir un candidato está difícil. En principio, tradicionalmente ha sido un circuito McLaren, y ellos fueron los que hicieron la pole y el doblete el año pasado. Su velocidad punta será una inmensa ventaja tanto para ganar tiempo por las rectas como para evitar ser adelantados. A pesar del gran esfuerzo por rebajar el centro de gravedad en el MP4-26, los pilotos opinan que el coche sigue siendo muy parecido en reacciones al del 2010.
En cuanto a Ferrari, la oportunidad es tan buena como Mónaco, salvo por la necesidad de contar con cierta velocidad punta. Por lo demás, volverán a agradecer el compuesto superblando, del que saben extraer más rendimiento que a neumáticos más duros. Además, el gran punto fuerte de Ferrari bajo el mandato de Aldo Costa en la dirección técnica ha sido la tracción al volver a pisar el acelerador… y Montreal es una sucesión de horquillas y chicanes de las que Alonso y Massa podrán salir disparados con su 150º Italia.
El último factor a considerar en el Gran Premio de Canadá es la alta probabilidad de que tenga que salir a pista el Safety Car. El año pasado se libraron, pero cuando lo hace trastoca los planes de todos los pilotos. En gran medida, el hecho de que los coches se vean obligados a pasar rozando el hormigón es clave para los resultados extraños que comentábamos: rompe en ellos la suspensión y tu coche se quedará en mitad de la pista. Para que la grúa pueda ir a recogerlo, el Safety Car es indispensable. Y entonces, el piloto menos pensado se atreve con una estrategia arriesgada y se mete en los primeros puestos. De esa locura hablamos cuando hablamos de Canadá.
Para no perderte
Circuito: Circuit Gilles Villeneuve (Montreal)
Vueltas: 70
Longitud: 4,361 km.
Distancia de carrera: 305,270 km.
Record de vuelta: 1:13.622. Rubens Barrichello (Ferrari, 2004)
Anteriores ganadores
2010: Lewis Hamilton (McLaren)
2009: No se disputó.
2008: Robert Kubica (BMW)
2007: Lewis Hamilton (McLaren)
2006: Fernando Alonso (Renault)
Neumáticos
Blando y superblando.
Horarios
Libres 1.1: Viernes 16:00
Libres 1.2: Viernes 20:00
Libres 1.3: Sábado 16:00
Calificación: Sábado 19:00
Carrera: Domingo 19:00