Cada aspecto del lanzamiento de un nuevo modelo es cuidado al detalle, como el tema de su nombre y los anagramas que llevará en la chapa del coche. Se estudia la sonoridad al pronunciarse, la disponibilidad del término en el registro mercantil, y se diseña toda su «imagen corporativa».
Además, cada cierto tiempo el logo principal también requiere de una «puesta al día». Fíjense en la evolución de la «S» se Seat, el león de Peugeot o el famoso rombo de Renault.
Esta última, precisamente, es la coprotagonista de esta curiosa historia de polémica, plagios y logos prohibidos…
El año clave: 1992. La marca francesa estrenaba una puesta al día del cuadrilátero que lucían sus modelos: su rombo se modernizaba con una imagen más limpia y toque tridimensional. Ese mismo año, el trabajo de meses y meses de los responsables de marketing de Mazda culminaba, también, en una nueva imagen de marca, y presentaron un anagrama en el que un óvalo cromado incluía lo que pretendía ser la representación de una gota en el centro de un tallo. El conjunto se completaba con la tipografía de 1975.
Y saltó la polémica. A Renault no le hizo ninguna gracia cómo quedaba el nuevo emblema de Mazda en los coches, asegurando que se parecían en exceso e instando a que la marca japonesa no lo utilizase.
Como no hubo acuerdo, ambos fabricantes fueron a los tribunales para que dictaminasen si había o no plagio…y sí, lo hubo. La Justicia se pronunció en otoño, y le dio la razón a Renault, dictando que «Mazda Motor Corporation debe retirar de la circulación los existentes, tanto en coches como en sobres, papelería» y demás elementos de merchandising.
Sí, todo un varapalo económico. En junio de 1997 se presentaba un nuevo logotipo para todo el mundo con la “M” de Mazda y una “V” muy característica que representa «a una empresa que extiende las alas para elevarse hacia el futuro».
La gota y el tallo pasaron a la historia…una de esas curiosas historias que suceden “tras el telón” y de las cuales está plagado el mundo del automóvil. Anécdotas que Tallerator irá rescatando para nuestros lectores.