Peter Solberg Subaru Impreza WRC 540.000 – – 300 CV – 200 km/h – 40 l/100 km Veredicto del piloto El Subaru Impreza WRC es, sin lugar a dudas, uno de los coches más rápidos del Mundial de Rallyes. ¿Su secreto? El equilibrio que consigue en todos sus apartados. Destaca también por el hecho de […]
El Subaru Impreza WRC es, sin lugar a dudas, uno de los coches más rápidos del Mundial de Rallyes. ¿Su secreto? El equilibrio que consigue en todos sus apartados. Destaca también por el hecho de tener el centro de gravedad algo más bajo que sus rivales, gracias al motor de cilindros opuestos -el resto de oponentes los tiene en línea-. Es muy fácil pilotarlo, pues se muestra muy noble y responde de forma instantánea a todas las órdenes que se le den desde el cockpit. De hecho, casi cualquier persona podría llevarlo al 80% de sus posibilidades… Eso sí, sacarle el 20% restante es lo verdaderamente complicado.
Dani Sordo
Citroën C4 VTS
20.950 – – 80 CV – 227 km/h – 8,4 l/100 km
Veredicto del piloto
El Citroën C4 2.0 16V VTS me parece una de las opciones más razonables entre los compactos deportivos. ¿Por qué? En primer lugar, su precio es imbatible para el resto de sus rivales, a lo que hay que sumar un equipamiento de serie en el que no falta prácticamente nada. Por otra parte, tiene un interior amplio y con una muy buena accesibilidad -a pesar de tener tres puertas-, además de un maletero suficiente. Y, por supuesto, cuenta con un motor -rabioso-, capaz de proporcionar muchas satisfacciones… siempre que lo llevemos por encima de 4.000 rpm. El comportamiento es muy noble, y por eso es manejable por cualquiera con mucha sencillez.
Marc Gené
Maserati Coupé GT Gransport
116.743 – – 400 CV – 290 km/h – 18,6 l/100 km
Veredicto del piloto
Lo que más me ha gustado del coche son los frenos: los he probado incluso en circuito. El cambio es rápido y suave y los amortiguadores varían su tarado contínuamente. No estaría de más un sensor de aparcamiento delantero, ya que la visibilidad es mejorable y también echo en falta un techo panorámico. Pero lo que más me gusta son las prestaciones -sobre todo por la aceleración- y la línea del coche, con un frontal y una trasera muy definidos y atractivos. En cambio, retocaría los faldones laterales; les quitaría algo de fibra para evitar roces fortuitos al aparcar.
Jordi Gené
Volkswagen Golf R32
36.605 – – 250 CV – 250 km/h – 10,7 l/100 km
Veredicto del piloto
El Volkswagen Golf R32 es un compacto muy rápido y eficaz con un considerable toque rácing… pero no es un deportivo puro: para eso ya está el GTI. Me ha gustado especialmente por sus frenos, su impresionante capacidad de tracción y la buena y progresiva respuesta del motor. Sin embargo, en curva se ve algo más limitado por un reparto de pesos un poco desfavorable -hay muchos kilos sobre el eje delantero-… Eso sí, yo no dudaría en comprármelo con cinco puertas -605e más- y con cambio DSG -1.500 más-, mucho más cómodo y con una rapidez de respuesta más que suficiente -además, consume de media un litro menos cada 100 km que el manual-.
Adrián Vallés
Porsche 911 Carrera Cabrio
107.968 – – 355 CV – 293 km/h – 11,9 l/100 km
Veredicto del piloto
El Porsche 911 Carrera S Cabrio es un excelente deportivo por prestaciones, con una imagen mítica inigualable y una calidad interior soberbia. Con él se puede disfrutar mucho de la conducción en cualquier carretera… pero, ¿es necesario realizar tal desembolso? Pues probablemente no, ya que quien quiera sólo un buen descapotable con cierto carácter tendrá bastante con la versión Carrera de 325 CV -que cuesta 96.704 euros, es decir, 11.264 menos– o con un -simple- Boxster -desde 48.576 euros-, mientras que quien busque un Porsche por pura deportividad, seguramente, terminará más satisfecho si opta por el 911 Carrera S coupé… o el nuevo Cayman S-295 CV -65.344 euros-.
Dani Sordo
Citroën C2 VTS 1.6 16V
13.525 – – 125 CV – 202 km/h – 6,9 l/100 km
Veredicto del piloto
El Citroën C2 VTS 16V es un excelente mini GTI con el que puedes disfrutar una barbaridad sobre carreteras reviradas. Tiene un motor que da lo mejor de sí a altas vueltas, lo cual te -obliga- a utilizar mucho el cambio… y este tipo de conducción te acaba -enganchando-. Por lo demás, este C2 no te pone en apuros: frena muy bien, es muy noble, su comportamiento es excelente… y, por si acaso, el control de estabilidad ESP es de serie. Además, cuenta con una relación precio-equipamiento difícil de igualar por cualquiera de sus rivales. Por último, en mi caso, he de reconocer que es un vehículo al que le tengo especial cariño, pues me ha servido a la perfección como coche de entrenamiento para todos los rallyes del Campeonato de España que gané la pasada temporada… y también como el automóvil que he utilizado a diario cuando no estaba en las carreras.
Jordi Gené
Audi RS4
82.200 – – 420 CV – 250 km/h – 13,4 l/100 km
Veredicto del piloto
El departamento deportivo de Audi ha logrado superarse una vez más; si los anteriores RS2, RS4 y RS6 ya se convirtieron en modelos de referencia entre las berlinas de altas prestaciones, la nueva edición del RS4 vuelve a situarse un paso por delante de sus rivales -al menos hasta que llegue el próximo BMW M3, a finales de año-, ofreciendo unas cualidades dinámicas superiores, incluso, a las de un Porsche… pero con la ventaja de añadir un habitáculo para cuatro ocupantes y sus equipajes. Además de ésto, el RS4 es un modelo muy avanzado, como demuestra su suspensión activa DRC, o la función Sport que hace aún más rápida la respuesta al acelerador. ¿Cómo sería perfecto? Con un cambio automático con doble embrague, como el que equipan otros modelos del Grupo VW -Golf, Passat…-.
Andy Soucek
Porsche Cayman S
65.344 – – 295 CV – 275 km/h – 10,6 l/100 km
Veredicto del piloto
Me ha encantado el Porsche Cayman S. Me parece un deportivo muy equilibrado, con un motor de excelente rendimiento a altas revoluciones y un comportamiento que, al límite, se muestra extremadamente ágil, pero con una nobleza de reacciones impresionante. Aunque tome la plataforma del Boxster, va mejor con diferencia, y creo que hasta un 911 -normal- puede tener serios problemas para mantener el ritmo de un Cayman en cualquier carretera de montaña. Por diseño, y aunque es algo muy personal, me parece muy atractivo, con un toque de agresividad que, para mí, lo diferencia de otros Porsche. Por su parte, el precio es elevado, pero lo vale -y eso que le faltan algunos elementos de equipamiento básicos…-.
Los consumos no son bajos en ningún momento, pero un motor de tales prestaciones, con 3.4 l de cilindrada, que obliga a llevarlo revolucionado para extraer lo mejor de sí, y con un sistema de alimentación muy tradicional no puede consumir menos.
Carlos Hernández
Hyundai Getz de Competición
(1.5 CRDI)
16.000 – + IVA- 130 CV – 210 km/h – 1.493 cc.
Veredicto del piloto
Vale, las prestaciones no son ni mucho menos comparables a las de su hermano mayor, el Coupé, pero no tiene nada que envidiarle en aspectos como agarre en curva, capacidad de frenada y precisión de guiado. Pude comprobarlo en una rápida toma de contacto en el circuito de Jerez. Primeras impresiones: positivas. El asiento baquet, situado muy bajo y anclado fijo al suelo, el cinturón de arnés de seis puntos bien ajustado, el casco bien sujeto, guantes, escarpines… Todo está listo para iniciar el aprendizaje.
Borja García
Ford Focus ST
26.140 – – 225 CV – 241 km/h – 9,3 l/100 km
Veredicto del piloto
Voy a ser muy conciso: me están esperando en un concesionario para encargar un Ford Focus ST naranja de tres puertas. Eso sí, sin tapicería de cuero -prefiero la de tela-; también tendré que solicitar una suspensión más firme, porque la de serie es un poco blanda para mi gusto. Pero, por lo demás, el ST se adapta perfectamente a mis necesidades: corre, se -agarra-, frena… Por precio no es caro: cuesta menos que un Mégane RS o un Astra OPC, mientras que un Golf GTI cuesta casi lo mismo… pero es menos potente. Y en cuanto a consumo, gasta más que el Golf, pero comparado con los de su potencia las cifras son muy similares.
Marc Gené
Alfa Brera 3.2 JTS Select
43.400 – – 260 CV – 240 km/h – 11,5 l/100 km
Veredicto del piloto
Creo que a cualquier coupé hay que exigirle dos cosas: una, que sea muy atractivo visualmente; y dos, que en marcha transmita -sensaciones-. En el primer aspecto, pienso que no hay dudas sobre el acierto de Giugiaro; sólo hay que darse una vuelta con él para convertirnos en el centro de todas las miradas. En el segundo, el Brera ofrece, a partes iguales, deportividad -gracias a su chasis muy afinado- y seguridad -se nota la tracción total-. En conjunto, todo esto te permite desconectar las ayudas electrónicas y divertirte al máximo, pero sin tener que ir constantemente -cruzado-. Además, la motorización V6 del Brera proporciona unas prestaciones dignas… que serían mejores si el coche pesara menos. En resumen, sería mi Alfa ideal… ¡si no fuera porque acabo de ser padre!
El Subaru Impreza WRC es, sin lugar a dudas, uno de los coches más rápidos del Mundial de Rallyes. ¿Su secreto? El equilibrio que consigue en todos sus apartados. Destaca también por el hecho de tener el centro de gravedad algo más bajo que sus rivales, gracias al motor de cilindros opuestos -el resto de oponentes los tiene en línea-. Es muy fácil pilotarlo, pues se muestra muy noble y responde de forma instantánea a todas las órdenes que se le den desde el cockpit. De hecho, casi cualquier persona podría llevarlo al 80% de sus posibilidades… Eso sí, sacarle el 20% restante es lo verdaderamente complicado.
El Citroën C4 2.0 16V VTS me parece una de las opciones más razonables entre los compactos deportivos. ¿Por qué? En primer lugar, su precio es imbatible para el resto de sus rivales, a lo que hay que sumar un equipamiento de serie en el que no falta prácticamente nada. Por otra parte, tiene un interior amplio y con una muy buena accesibilidad -a pesar de tener tres puertas-, además de un maletero suficiente. Y, por supuesto, cuenta con un motor -rabioso-, capaz de proporcionar muchas satisfacciones… siempre que lo llevemos por encima de 4.000 rpm. El comportamiento es muy noble, y por eso es manejable por cualquiera con mucha sencillez.
Lo que más me ha gustado del coche son los frenos: los he probado incluso en circuito. El cambio es rápido y suave y los amortiguadores varían su tarado contínuamente. No estaría de más un sensor de aparcamiento delantero, ya que la visibilidad es mejorable y también echo en falta un techo panorámico. Pero lo que más me gusta son las prestaciones -sobre todo por la aceleración- y la línea del coche, con un frontal y una trasera muy definidos y atractivos. En cambio, retocaría los faldones laterales; les quitaría algo de fibra para evitar roces fortuitos al aparcar.
El Volkswagen Golf R32 es un compacto muy rápido y eficaz con un considerable toque rácing… pero no es un deportivo puro: para eso ya está el GTI. Me ha gustado especialmente por sus frenos, su impresionante capacidad de tracción y la buena y progresiva respuesta del motor. Sin embargo, en curva se ve algo más limitado por un reparto de pesos un poco desfavorable -hay muchos kilos sobre el eje delantero-… Eso sí, yo no dudaría en comprármelo con cinco puertas -605e más- y con cambio DSG -1.500 más-, mucho más cómodo y con una rapidez de respuesta más que suficiente -además, consume de media un litro menos cada 100 km que el manual-.
El Porsche 911 Carrera S Cabrio es un excelente deportivo por prestaciones, con una imagen mítica inigualable y una calidad interior soberbia. Con él se puede disfrutar mucho de la conducción en cualquier carretera… pero, ¿es necesario realizar tal desembolso? Pues probablemente no, ya que quien quiera sólo un buen descapotable con cierto carácter tendrá bastante con la versión Carrera de 325 CV -que cuesta 96.704 euros, es decir, 11.264 menos– o con un -simple- Boxster -desde 48.576 euros-, mientras que quien busque un Porsche por pura deportividad, seguramente, terminará más satisfecho si opta por el 911 Carrera S coupé… o el nuevo Cayman S-295 CV -65.344 euros-.
El Citroën C2 VTS 16V es un excelente mini GTI con el que puedes disfrutar una barbaridad sobre carreteras reviradas. Tiene un motor que da lo mejor de sí a altas vueltas, lo cual te -obliga- a utilizar mucho el cambio… y este tipo de conducción te acaba -enganchando-. Por lo demás, este C2 no te pone en apuros: frena muy bien, es muy noble, su comportamiento es excelente… y, por si acaso, el control de estabilidad ESP es de serie. Además, cuenta con una relación precio-equipamiento difícil de igualar por cualquiera de sus rivales. Por último, en mi caso, he de reconocer que es un vehículo al que le tengo especial cariño, pues me ha servido a la perfección como coche de entrenamiento para todos los rallyes del Campeonato de España que gané la pasada temporada… y también como el automóvil que he utilizado a diario cuando no estaba en las carreras.
El departamento deportivo de Audi ha logrado superarse una vez más; si los anteriores RS2, RS4 y RS6 ya se convirtieron en modelos de referencia entre las berlinas de altas prestaciones, la nueva edición del RS4 vuelve a situarse un paso por delante de sus rivales -al menos hasta que llegue el próximo BMW M3, a finales de año-, ofreciendo unas cualidades dinámicas superiores, incluso, a las de un Porsche… pero con la ventaja de añadir un habitáculo para cuatro ocupantes y sus equipajes. Además de ésto, el RS4 es un modelo muy avanzado, como demuestra su suspensión activa DRC, o la función Sport que hace aún más rápida la respuesta al acelerador. ¿Cómo sería perfecto? Con un cambio automático con doble embrague, como el que equipan otros modelos del Grupo VW -Golf, Passat…-.
Me ha encantado el Porsche Cayman S. Me parece un deportivo muy equilibrado, con un motor de excelente rendimiento a altas revoluciones y un comportamiento que, al límite, se muestra extremadamente ágil, pero con una nobleza de reacciones impresionante. Aunque tome la plataforma del Boxster, va mejor con diferencia, y creo que hasta un 911 -normal- puede tener serios problemas para mantener el ritmo de un Cayman en cualquier carretera de montaña. Por diseño, y aunque es algo muy personal, me parece muy atractivo, con un toque de agresividad que, para mí, lo diferencia de otros Porsche. Por su parte, el precio es elevado, pero lo vale -y eso que le faltan algunos elementos de equipamiento básicos…-.
Vale, las prestaciones no son ni mucho menos comparables a las de su hermano mayor, el Coupé, pero no tiene nada que envidiarle en aspectos como agarre en curva, capacidad de frenada y precisión de guiado. Pude comprobarlo en una rápida toma de contacto en el circuito de Jerez. Primeras impresiones: positivas. El asiento baquet, situado muy bajo y anclado fijo al suelo, el cinturón de arnés de seis puntos bien ajustado, el casco bien sujeto, guantes, escarpines… Todo está listo para iniciar el aprendizaje.
Voy a ser muy conciso: me están esperando en un concesionario para encargar un Ford Focus ST naranja de tres puertas. Eso sí, sin tapicería de cuero -prefiero la de tela-; también tendré que solicitar una suspensión más firme, porque la de serie es un poco blanda para mi gusto. Pero, por lo demás, el ST se adapta perfectamente a mis necesidades: corre, se -agarra-, frena… Por precio no es caro: cuesta menos que un Mégane RS o un Astra OPC, mientras que un Golf GTI cuesta casi lo mismo… pero es menos potente. Y en cuanto a consumo, gasta más que el Golf, pero comparado con los de su potencia las cifras son muy similares.
Creo que a cualquier coupé hay que exigirle dos cosas: una, que sea muy atractivo visualmente; y dos, que en marcha transmita -sensaciones-. En el primer aspecto, pienso que no hay dudas sobre el acierto de Giugiaro; sólo hay que darse una vuelta con él para convertirnos en el centro de todas las miradas. En el segundo, el Brera ofrece, a partes iguales, deportividad -gracias a su chasis muy afinado- y seguridad -se nota la tracción total-. En conjunto, todo esto te permite desconectar las ayudas electrónicas y divertirte al máximo, pero sin tener que ir constantemente -cruzado-. Además, la motorización V6 del Brera proporciona unas prestaciones dignas… que serían mejores si el coche pesara menos. En resumen, sería mi Alfa ideal… ¡si no fuera porque acabo de ser padre!
