¿Sabés cómo mantener en el aire acondicionado para que funcione correctamente?

Javier Jiménez
Javier Jiménez
Con la llegada del calor, el aire acondicionado de nuestro coche se convierte en uno de los elementos fundamental. Y es que, además de resultar incómodo, el aire acondicionado es fundamental para frenar el exceso de calor al realizar largos desplazamientos.

Si se observa un problema en el funcionamiento del aire acondicionado, es necesario revisar el sistema y probablemente realizar una recarga de aire. Llevar a cabo un correcto mantenimiento de este elemento está directamente relacionado con cuestiones como el ahorro de combustible, la ausencia de ruidos molestos en el interior del vehículo o una menor presencia de bacterias. En este sentido, la cadena de talleres Norauto pretende despejar las principales dudas que puedan surgir acerca de las posibles averías y el proceso de recarga del climatizador de nuestro coche.

¿Cuánto cuesta recargar el aire acondicionado del coche?

¿En qué consiste el proceso de carga?

El proceso de carga es un proceso de recuperación del gas y aceite antiguo para su reciclado, extracción de la humedad, control de estanqueidad, carga de gas con su aceite nuevo y finalmente el control de rendimiento. 

¿Por qué hay que cambiarlo? 

Con el paso del tiempo una rueda pierde presión. Esto mismo ocurre con el aire acondicionado. En este caso, aunque los circuitos de aire acondicionado son herméticos, con el tiempo pueden perder gas progresivamente.

¿Cómo detectar si hay un problema con el aire acondicionado?

Por un lado el primer paso será comprobar que, al conectar el sistema, no emite sonidos extraños para descartar una posible avería. Por otro lado, si el sistema deja de enfriar y, por lo tanto, no no permite regular la temperatura dentro del habitáculo lo más probable es que tengas que recargarlo.

¿Con qué frecuencia se debe revisar la carga de aire y cuándo se debe cambiar el gas?

Por supuesto, se debe revisar el sistema siempre que haya o se detecte algún problema. Lo ideal es revisar el sistema de aire acondicionado del coche cada 2 años. Si es necesario hacerlo con más frecuencia, seguramente el sistema tenga algún fallo y, por lo tanto, se debe realizar una revisión del sistema.

Recargar aire acondicionado

¿Qué tipos de carga de aire existen?

Si el vehículo es anterior a 2017, seguramente es necesario utilizar el gas tradicional R134A. Si el vehículo es posterior, se debe utilizar el gas R1234YF, aunque estas fechas son orientativas porque antes de 2017 algunos fabricantes ya implementaron el R-1234YF.

¿Por qué hay gases diferentes?

El gas R134A era el que se utilizaba previamente pero se dejó de emplear por su efecto negativo en el medio ambiente. A partir del 2018, los vehículos nuevos incorporan el R1234YF, que emite menos gases de efecto invernadero a la atmósfera, siempre con el objetivo en mente de cuidar mejor nuestro planeta.

¿Qué ocurre si ponen un gas que no es el que corresponde al vehículo?

En primer lugar, hay que tener muy en cuenta que solo se debe utilizar gas que esté debidamente homologado. El fabricante del vehículo es el que determina y homologa sus coches con unas especificaciones técnicas y mecánicas concretas, entre ellas, el tipo de gas y cantidad que usa la instalación de aire acondicionado. 

En este sentido, es importante cerciorarse de que se está realizando una recarga del gas adecuada, segura y que corresponde con las características del coche. Por este motivo, se recomienda hacerlo en un lugar especializado y que cumpla con la normativa. Su manipulación requiere mucha prudencia y debe realizarse por un profesional.

¿Cuánto tiempo debe permanecer el vehículo en taller para realizar esta revisión y recarga?

Aunque todo va a depender de la carga de trabajo, una revisión del sistema puede suponer 30 minutos y la recarga de aire se puede realizar en 1 hora.

¿Qué puede hacer el conductor para que el aire acondicionado dure más tiempo y esté en mejor estado?

Una de las prácticas más sencillas pasa por utilizar el climatizador también durante el invierno, ya que es un buen método para quitar el vaho del parabrisas. Además, ayuda a lubricar el compresor y evita que se resequen las juntas y, por tanto, el riesgo de fuga de gas.