Mazda MX-5 1.8 16V Active

Dicen en la marca que por estas razones han creado un MX-5 completamente nuevo… pero con un diseño muy similar al de su antecesor:-se mantiene como un roadster deportivo no muy potente, aunque registra buenas prestaciones. Eso sí, su mayor peso -en parte por el aumento de equipamiento- y tamaño le han restado un ápice de aquella agilidad que también le caracterizaba: va muy bien y se ha adaptado a los nuevos tiempos, pero ha perdido -romanticismo-.

Por dentro y por fuera

El sistema de la capota es manual -no hay previsto uno eléctrico-, pero resulta sencillo -se suelta el enganche central, se pliega, y otro acople la sujeta -y rápido -emplearás unos seis segundos-. El 1.8i tiene la capota de vinilo, mientras que la del 2.0 es de una tela de más calidad. En ambas se ven las barras de la estructura. Su aislamiento acústico es pobre, aunque mejor que el del anterior MX-5. En opcion -por 2.000-, aunque varía según el concesionario- ofrece un techo duro desmontable. En el Salón del Automóvil de Londres, en julio, se presentará una variante con techo duro retráctil eléctrico.

El interior es algo más espacioso que el de su antecesor -suficiente para personas de hasta 1,85 m-, pues se ganan casi nueve cm en anchura y 1,7 cm en altura. Buena calidad. Los plásticos blandos utilizados en la parte superior del salpicadero y en las puertas son excelentes, igual que el ajuste general. Sólo desentona el plástico duro de la guantera. En las puertas existen dos huecos para dejar botellas que, aunque resultan muy prácticos, restan espacio a las piernas. La postura de conducción es buena, gracias a que el volante se regula en altura -además, es multifunción sólo en los Active+-, pero al ser bastante baja dificulta ligeramente el acceso. Los asientos son cómodos y sujetan bien. El maletero, con sólo 185 litros, es pequeño.

Cómo va

El nuevo MX-5 ofrece mejores prestaciones por dos motivos: sólo pesa diez kilos más que su antecesor -1.155 kg- y su motor dispone de diez CV más -126-. Tanto el chasis como el motor -de origen Ford- son nuevos. Suspensiones de primera. Es de tipo multibrazo en el eje posterior, lo que asegura un excelente comportamiento en curva. También destaca el buen reparto de pesos 50% delante-50% detrás, el tacto rápido y directo de la dirección -que resulta muy precisa- y los cortos y precisos recorridos del cambio -de cinco velocidades en esta versión-. El control de estabilidad es de serie desde el acabado Active +. La nota negativa es que sus reacciones al límite son más bruscas y menos predecibles que las de su antecesor por su mayor peso y su mayor capacidad de agarre, lo que le resta agilidad. Eso sí, el límite ahora está más lejos. El 1.8i atmosférico de cuatro cilindros tiene una brillante respuesta a cualquier régimen, llegando a superar las 7.000 rpm sin denotar falta de empuje. Los frenos resultan potentes y con una buena resistencia a la fatiga -gracias también al bajo peso del MX-5-.

Veredicto

Ficha técnica y gama

Su antecesor se mantuvo casi 16 años

Más grande. Lo que más aumenta es la anchura -pasa de 1,68 m a 1,72-; en longitud y altura sólo crece dos cm: de 3,97 m pasa a 3,99 y de 1,22 m a 1,24, respectivamente.

Parece más coche. Y no por el incremento de las dimensiones, que no es excesivo, sino por detalles de diseño como unas aletas ensanchadas que -ocultan- unas vías 75 mm más anchas delante y 55 detrás que el anterior modelo.

Hay cosas que nunca cambian. La forma de los retrovisores, los tiradores de las puertas y la parrilla frontal se inspiran en el modelo originario de 1989.

Puede y no puede llevar. Si adquieres la versión básica, no podrás contar, ni en opción, con faros antiniebla o de xenón -reservados para el 2.0 y el acabado Sportive-; sí son de serie la llantas de aleación de 16″ con neumáticos de 205 mm de ancho.

Lo que otros no te cuentan

La gama. La familia de motores la componen dos mecánicas de gasolina:-un 1.8 y un 2.0 -no hay previsto ningún diesel-. El primero se ofrece en un acabado denominado Active -el más básico de la oferta, aunque ya resulta bastante completo- y otro conocido como Active+, mientras que el propulsor más potente está disponible con tres terminacione: Active+, Sportive y 3rd Generation Limited -esta última es una serie especial.

El MX-5 más exclusivo. Mazda inició la comercialización de su nuevo roadster en noviembre de 2005 con una edición especial limitada denominada 3rd Generation Limited, de la que sólo se destinarán 135 unidades al mercado español -3.500 en todo el mundo-. Cuesta 31.300e y ofrece elementos de equipamiento específicos: tapicería de cuero roja, marco del parabrisas cromado…

Así va capotado. En el interior la sensación es algo claustrofóbica debido al poco espacio disponible -y eso que es más amplio que el anterior MX-5-. Además, en marcha se filtran muchos ruidos aerodinámicos, mientras que la mecánica se deja oír siempre.

Así va descapotado. Aunque es extraño, con las ventanas subidas y el paravientos colocado, el ruido a 100 km/h es menor que con la capota de tela puesta. No resulta molesto.

Por 5.200 – más. Por 27.400- se puede dar el salto al 2.0i Active+, cuyo motor de 160 CV y cambio de seis marchas lo hacen claramente más rápido. Además, ofrece de serie climatizador, ESP, TCS, llantas de 17-… Alcanza 210 km/h y acelera de 0 a 100 en 7,9 segundos, con un consumo de 8,2 l/100 km.

Puede y no puede llevar. Mazda ha dotado al MX-5 del Libro de Mantenimiento Digital que ya estrenó en su día el -5-. Se trata de una base de datos que contempla todos los trabajos que se efectúan a cada unidad y que comparte toda la red de concesionarios de la marca. En él se incluyen revisiones, reparaciones de mecánica y chapa, sustitución de neumáticos… El fin es garantizar las compras de los clientes de modelos Mazda de segunda mano… y asegurarse que todos los dueños de un automóvil de la firma realicen todas sus revisiones en sus talleres oficiales -de lo contrario, no quedará registrada en esta base de datos-.

Rivales

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