Como ejemplo podemos hablar de Mazda, que hoy nos ha desvelado más detalles acerca de las tecnologías denominadas SKYACTIV, toda una nueva generación de motores, transmisiones, carrocerías y plataformas que aportarán importantes reducciones de consumo y emisiones a partir de 2011.
Como si de Lotus se tratase, Mazda basará su estrategia inicial en la reducción de peso, para más tarde introducir tecnologías más avanzadas como los frenos regenerativos y los sistemas híbridos. Con este esfuerzo, la marca japonesa tiene como objetivo reducir el consumo de combustible de toda su gama en un 30% en 2015, en comparación con los datos de 2008.
Nuevos motores gasolina y diésel
El apartado mecánico no quedará al margen de esta tendencia ecológica, y Mazda ya trabaja en dos nuevas generaciones de propulsores, tanto de gasolina como diésel. Dentro del primer grupo encontramos el motor SKYACTIV-G, un bloque de inyección directa que utiliza la mayor relación de compresión empleada nunca en un motor de gasolina: 14,0:1. Esto se traduce en un ahorro de combustible del 15% y el aumento de par en otro 15%.
La misma relación 14,0:1 se emplea también en el motor diésel SKYACTIV-D, cuyo ahorro de gasóleo llega al 20% (no sabemos cómo lo harán porque a priori no parece una relación muy eficiente). Esta mecánica ya cumplirá la normativa de emisiones Euro 6 sin emplear postratamientos para reducir los óxidos de nitrógeno (NOx). Además, un turbocompresor de dos fases garantiza la entrega del par máximo tanto a bajas revoluciones como en el límite máximo: 5.200 rpm.
Otras tecnologías
Junto a estos avances, las tecnologías SKYACTIV también engloban otros desarrollos de relevancia, como la nueva transmisión automática SKYACTIV-Drive o la manual SKYACTIV-MT. La primera de ellas ofrece todas las ventajas de las transmisiones automáticas convencionales, las de variador continuo y las de doble embrague. Eleva la eficiencia del convertidor de par y de transferencia de par y reduce el consumo hasta un 7% en comparación con la transmisión automática actual. En cuanto a la manual, reduce la fricción interna y tiene un tamaño más compacto para una mayor eficiencia y unos recorridos más cortos.
En lo que a reducción del peso se refiere, Mazda trabaja actualmente en la estructura de carrocería SKYACTIV-Body y la plataforma SKYACTIV-Chassis. Esta nueva carrocería es un 8% más ligera y un 30% más rígida gracias a la utilización de aceros de alta resistencia y materiales de unión optimizados. Por su parte, la nueva plataforma es un 14% más ligera y ofrece una suspensión novedosa, algo que beneficia la precisión y el confort de marcha.