Los cambios más significativos los encontramos en los motores más prestacionales, los V6 y V8, que hasta ahora figuraban como los únicos sin inyección directa. La versión E 500, la más potente de la gama, ha sido rebautizada como E 500 BlueEFFICIENCY, una etiqueta que expone bien a las claras la vocación de eficiencia de esta nueva variante. Para empezar, la mecánica 5.5 V8 de 388 CV ha sido sustituida por un motor V8 biturbo BlueDIRECT de 4.6 litros con una potencia máxima que se estira hasta los 408 CV. Se acopla con la caja de cambios 7G-TRONIC, junto a la que consigue desarrollar un par de 600 Nm -el anterior se quedaba en 530-. A pesar de este aumento de las cifras, mantiene la aceleración de 0 a 100 km/h en 5,2 segundos, con una velocidad máxima limitada electrónicamente a 250 km/h. Lo que sí se reduce de manera sensible es el consumo, que cae de 10,8 a 8,9 litros cada 100 km/h.
Algo similar ocurre con el E 350 BlueEFFICIENCY, cuyo motor V6 deja su sitio a otro de la misma arquitectura, pero con inyección directa y función Stop/Start para reducir el gasto de combustible. La pontecia aumenta de 292 a 306 CV, algo que redunda en una mejor aceleración: el 0 a 100 km/h lo hace ahora en 6,3 segundos, siete décimas más rápido que con la anterior mecánica. La velocidad máxima se mantiene limitada a 250 km/h. Al igual que en el anterior caso, el consumo es el principal beneficiado: ahora, el E 350 BE se conforma con 6,8 litros cada 100 km -por 8,5 del anterior-, una cifra que es de 7,0 litros en el caso del familiar o Estate. Si nos centramos en la berlina, las emisiones de CO2 también caen de manera sensible de 199 a 159 g/km.
El resto de motores de cuatro cilindros también han sido revisados para mejorar el consumo, aunque de manera menos profunda. Las versiones E 220 CDI BlueEFFICIENCY y E 250 CDI BlueEFFICIENCY consiguen reducir unas décimas y homologar un consumo mixto de 5,0 litros con la caja manual de seis velocidades, una cifra que con el cambio 7G-TRONIC Plus cae hasta los 4,9 litros. La paradoja la pone la versión E 200 CDI BE que, a pesar de ser menos potente que las dos anteriores, consume 5,1 l/100 km.
En el apartado de gasolina, el E 200 BlueEFFICIENCY de 184 CV reduce el consumo a 7,1 l/100 km con la caja manual y a 6,5 litros con la 7G-TRONIC Plus, mientras que el E 250 BlueEFFICIENCY de 204 CV -disponible sólo con cambio automático- se queda en unos interesantes 6,6 litros.
