Mitsubishi Outlander 2.0 (2007) DI-D Intense Plus

Una cierta imagen premium y esa sensación de seguridad que transmiten. En 2003, Mitsubishi entró en esta categoría de modelos con -estética TT–pero pensados más para asfalto que para campo- con el primer Outlander… y fracasó por no tener ningún motor diesel ni contar con unas aptitudes mínimas para campo. Afortunadamente, el nuevo Outlander es ‘otra historia’: mejora el comportamiento en campo y va muy bien en asfalto, equipa un buen motor diesel… y ahora ofrece hasta siete plazas. ¿Cuál es fallo? Que llegará al mercado el año en el que unos ocho* todo caminos verán la luz -2007-, muchos de ellos de marcas más conocidas por el público.

Por dentro y por fuera

El diseño interior es muy tradicional, y recuerda al de otros Mitsubishi -la pobre instrumentación es similar a la del Colt y las salidas de aire son como las del Grandis-. Los acabados se caracterizan por emplear unos plásticos algo duros -aunque bastante bien tratados, esto los hace agradables al tacto- y con algunos remates mejorables -por ejemplo, hay aristas cortantes en zonas como las bolsas de las puertas-. Los ajustes son correctos sin más, pero se aprecia un montaje sólido que no genera ningún ruido durante la marcha.
La distribución de mandos es muy clásica. Todo está suficientemente bien agrupado -sobre todo los mandos de la climatización- y -colocado a mano-, lo que evita posibles distracciones. Eso sí, algunos botones, como los de la izquierda del volante -que quedan ocultos-, o los de la radio -que son pequeños-, podrían estar mejor resueltos.
Los acabados Intense Plus y Kaiteki incluyen de serie un equipo de audio Rockford Fosgate -la segunda marca más importante de EE.UU después de Bose- de nueve altavoces y 650 watios de potencia. Su sonido tiene una calidad muy buena.
Destaca la guantera principal doble y los dos huecos que hay bajo el reposabrazos central -por cierto, cómodo y nada molesto en la conducción-; delante de éste se encuentra un posavasos doble. Hay otra guantera sobre la consola central, y las de las puertas tienen un tamaño correcto. Por último, hay sendas bolsas tras los dos asientos delanteros.

Delante: La postura de conducción es cómoda, a pesar de que el volante sólo cuenta con regulación en altura. Los asientos tienen un mullido algo blando, pero resultan bastante cómodos para realizar un viaje largo y ofrecen un agarre muy correcto.
Fila central: Para que el túnel central no moleste, el suelo en estas plazas -igual que los asientos- está 8 cm más alto que en las delanteras. Esto reduce la altura al techo -pero todavía es suficiente- y mejora la visibilidad. La banqueta se puede deslizar diez cm en longitud.
Última fila: Estas dos plazas son útiles sólo para emergencias o niños, pues el asiento es pequeño y el espacio para las piernas y la altura, reducido. Se despliega tirando de una palanca, y se pliega accionando un botón desde el maletero.
Maletero: Con siete plazas ofrece 220 litros, con cinco 774 -sin bandeja-, 882 si se adelanta la banqueta y 1.691 si se abate. El portón se puede abrir en dos partes -la inferior forma parte del paragolpes y soporta 200 kg- para facilitar la carga.

El acabado Intense Plus de la prueba y el Kaiteki ofrecen de una doble salida de escape cromada. No aporta nada más que estética, pues en el resto de versiones la salida de escape también es doble, pero va oculta tras el paragolpes.
El spoiler trasero y los faros posteriores con tecnología Led -respecto a una bombilla normal no se funden, se encienden más rápido y se ven mejor- son de serie en todos los Outlander. Las barras del techo también, excepto en el Invite.
Los acabados Intense Plus y Kaiteki equipan, de serie, llantas de 18- con neumáticos 225/55 -el resto, 215/70-16, con un diseño de llanta parecido-. Son exagerados para asfalto y, sobre todo, nada adecuados en tierra. Cuestan desde 240-/unidad.
La parrilla cromada es de serie en todos los acabados; los faros antiniebla también, excepto en el básico Invite. Por su parte, los de xenón -luz corta- sólo son de serie en el Kaiteki. Los paragolpes carecen de protecciones para pequeños roces.

Cómo va

El Outlander nos ha parecido tan cómodo, estable y fácil de conducir como una gran berlina media.
El motor -el mismo que lleva el VW Passat- se muestra ruidoso… pero desde 1.800 rpm es muy rápido.
Este modelo sólo se ofrece con un cambio manual de seis marchas; resulta fácil de manejar y muy preciso.
La suspensión tiene la firmeza justa: no permite balanceos y no es seca en baches. En general, el coche es ágil para su tamaño y se muestra neutro.
La dirección es demasiado blanda en parado pero en marcha es precisa. Los frenos son contundentes, pero se fatigan por los 1.700 kg que pesa el coche.

En carretera…
En ciudad: Va bien y la visibilidad es buena; lo más criticable es la dirección, muy blanda a baja velocidad. Sus 4,64 m de largo hacen que sea difícil de aparcar.
En carretera: Es donde mejor se defiende, aunque se echa en falta algo más de potencia para adelantar. La dirección en zona de curvas es muy precisa.

En campo…
En pistas rápidas: Se mueve con mucha agilidad y tiene un comportamiento muy noble. Resulta muy fácil de llevar y absorbe los baches con suavidad.
En pistas lentas: Va bien, pero sus neumáticos completamente de asfalto empiezan a -limitarle-.
Off road: No es lo suyo. Tracciona bien, pero los recorridos de la suspensión son demasiado cortos y el coche sólo tiene 17,9 cm de altura al suelo.

Veredicto

Ficha técnica y gama 2007

Lo que otros no te cuentan

¿Habrá una versión deportiva?Aprovechando el Salón SEMA de Las Vegas -noviembre 2006-, la filial de Mitsubishi en EE.UU. ha presentado el Evolander, una versión deportiva del nuevo Outlander que equipa un motor 3.0 V6 sobrealimentado por compresor y 300 CV. Pero lo más destacable es su sistema de transmisión, que está conformado por un cambio automático secuencial de seis velocidades y un sistema de diferenciales* controlados electrónicamente y derivado del que utiliza el Lancer Evo. Además, lleva llantas de 20 – y frenos Brembo.

¿Resulta caro de mantener?Las revisiones se realizan cada año o cada 15.000 km, y cuestan desde 140 euros aprox. El seguro, por su parte, a un varón residente en Madrid con más de 10 años de carnet el primer año le supondrá unos 2.173e en la Mutua Madrileña.

Existe un Outlander -viejo-… Fue un fracaso de ventas. Todavía puedes encontrar unidades de este modelo en stock, con descuentos de más de 3.000-… pero es menos recomendable que el actual. Mide 4,54 m de largo, tiene cinco plazas y 402 l de maletero, y sólo está disponible con tres motores de gasolina de 136, 160 y 202 CV -el primero con tracción delantera, es el más recomendable; el resto lleva tracción total-. Además, no es tan amplio ni va tan bien como el nuevo.

Tendrá dos -gemelos- franceses En verano, llegarán a España el Citroën C-Crosser y el Peugeot 4007. Comparten casi todo con el Outlander -Mitsubishi es quien los fabrica en Japón- excepto los motores, pues equipan un 2.2 HDI de 156 CV con cambio manual de seis marchas . Ambos estarán disponibles desde 30.500- aprox.

Más motores El Outlander sólo se va a comercializar con un motor diesel. Sin embargo, y aunque aún no se ha confirmado la fecha, también se ofrecerán dos de gasolina: un 2.4 de 170 CV y un 3.0 de 220. Por otra parte, Mitsubishi está en conversaciones con el Grupo PSA para incorporar, más adelante, el motor 2.2 HDI 156 CV que llevarán el Peugeot 4007 y el Citroën C-Crosser.

Rivales

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