Con el inicio de la Fase 0 de la desescalada, el Gobierno ha publicado en el BOE nuevas disposiciones sobre el uso del transporte público. La más significativa, ya que afecta a millones de personas en nuestro país, es el uso obligatorio de mascarillas “que cubran nariz y boca” para “todos los usuarios del transporte en autobús, ferrocarril, aéreo y marítimo”. Esta disposición estará en vigor hasta la finalización del estado de alarma.
Centrándonos en el uso del transporte público, la Orden Ministerial TMA/384/2020, de 3 de mayo, señala esta obligatoriedad para el uso de redes públicas de autobuses y ferrocarriles de Cercanías. Además, el Ejecutivo establece que los trabajadores de estos servicios que tengan “contacto directo con los viajeros” deberán ir provistos asimismo de mascarillas y “tener acceso a soluciones hidroalcóholicas” para higienizarse las manos de forma “frecuente”.
Reparto de 14,5 millones de mascarillas
Por ello, las delegaciones y subdelegaciones del Gobierno han comenzado a distribuir esta mañana 14,5 millones de mascarillas. De ellas, hasta seis millones serán distribuidas en unos 3.500 puntos de reparto, como intercambiadores de transporte y las principales estaciones, por 15.000 efectivos de miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.
Otros siete millones de mascarillas serán repartidos en los municipios, en colaboración con la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), ayuntamientos, diputaciones provinciales, cabildos y consells insulares. Por último, un millón y medio de mascarillas ya están siendo entregadas a tres entidades sociales para que estas las repartan. Son Cáritas, Cruz Roja y CERMI (Cómite Español de Representantes de Personas con Discapacidad).
Cómo te afecta si viajas en autobús o Cercanías
Junto con el uso obligatorio de las mascarillas, la Orden Ministerial establece asimismo que las empresas u organizaciones responsables del transporte, ya sea público, discrecional o privado de autobús o tren, “adoptarán las medidas necesarias para procurar la máxima separación posible entre los viajeros, de tal manera que no podrán ser ocupados más de la mitad de los asientos disponibles respecto del máximo permitido”. Asimismo, y en los autobuses, “se mantendrá siempre vacía la fila posterior a la butaca ocupada por el conductor”.
Si te toca viajar de pie, debes saber que el espacio entre viajeros también queda regulado, de forma que “se procurará que las personas mantengan entre sí la máxima distancia posible, “estableciéndose como referencia la ocupación […] de dos viajeros por cada metro cuadrado en la zona habilitada para viajar de pie”.
Unas medidas ya solicitadas por los usuarios
El establecimiento del uso obligatorio de mascarillas coincide con una de las mayores inquietudes y, a la vez, revindicaciones de los usuarios del transporte público, según refleja el informe “Encuesta post-COVID-19 España”, que la semana pasada publicó la app de movilidad Moovit, presente en 60 ciudades españolas.
En concreto, hasta un 76% de los 21.889 encuestados en todo el territorio nacional demandaban “el uso obligatorio de mascarillas” como una de las medidas que aportarían más seguridad a la utilización del transporte público. Una medida que finalmente ha adoptado el Gobierno pero que, en la fecha de la publicación del estudio de Moovit, ya era obligatoria en países como Francia, Italia, Bélgica o Alemania. Junto a esto, los usuarios del transporte público en España también demandan la limpieza y desinfección de los vehículos y andenes, el establecimiento de una distancia de un metro entre usuarios, el uso de guantes o el aumento de frecuencias de estos servicios.
La gente se desplazará menos… y más en coche
Del estudio de Moovit se puede prever una disminución general de la intención de desplazarse por parte de los españoles. Así, hasta un 82% de los encuestados señala que tiene decidido reducir el número de trayectos que realizaba antes de la pandemia, unos desplazamientos que se corresponden con aquellos realizados por motivos de ocio y salidas nocturnas (los evitarán el 71% de los encuestados) y por aquellos relacionados con el trabajo (un 12%). Este último motivo es una preocupación notable en el ánimo de los españoles, y hasta el 64% de los encuestados cree que debería implantarse, como medida general, el acceso al trabajo en horarios flexibles. Otro 56% solicita, además, la promoción y mantenimiento del teletrabajo.
Pero, junto a la reducción de trayectos, los españoles cambiaremos la forma de llevarlos a cabo. Así, por ejemplo, hasta un 25% de los usuarios de transporte público valora ir andando en vez de usar estos servicios, por el 24% que cree que utilizará el coche privado y un 8% que se moverá en bicicleta. El automóvil privado se mantiene, con un 29% de las preferencias, como uno de los medios de transporte que más utilizarán los españoles tras el confinamiento.