Los neumáticos, también denominados gomas o cubiertas, son elementos fabricados de caucho, que hacen que la conducción sea estable, segura y confortable. Elegir un buen neumático conlleva que el vehículo se comporte de una forma segura, ya que el neumático es el único elemento en contacto con el asfalto.
La principal característica que debe cumplir un neumático es la elasticidad, para poder soportar los esfuerzos a los que se somete diariamente. Otra de las características es la durabilidad, capaz de garantizar una larga vida útil del neumático y poder realizar un alto número de kilómetros antes de sustituirlos.
Los neumáticos están en contacto continuo con las irregularidades del terreno, con objetos que se desprenden de algunos vehículos y con el riesgo que supone por los posibles pinchazos e incluso reventones de los neumáticos.
Cuando nuestro vehículo nos avisa (si lleva sistema de aviso de presión de neumáticos) de una falta de presión de inflado en alguna rueda o simplemente observamos que una de ellas está desinflada, tenemos dos opciones: una, la sustitución de la rueda por la rueda de repuesto o dos, utilizar el kit de pinchazos para poder circular hasta el taller más próximo y arreglarlo.
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La mayoría de los fabricantes de vehículos sustituyen la rueda de repuesto por un kit antipinchazos, con lo cual reducen el peso y a la vez el consumo de combustible para conseguir entre otras cosas que las emisiones contaminantes se reduzcan.
Cuando sufrimos un pinchazo y es en carretera debemos tener en cuenta unas normas que harán segura la reparación del pinchazo, siendo estas las siguientes:
- Echar freno de mano ya sea eléctrico o manual.
- Al bajarse del vehículo hacerlo ya con el chaleco puesto.
- Señalizar la zona con el triángulo y con rotativo led si disponemos de él.
Una vez que tenemos todo señalizado, procederemos a la reparación del pinchazo con el kit antipinchazos. En primer lugar, revisaremos la fecha de fabricación del kit y no tiene que estar fabricado más de 4 años o de lo contrario puede ser que no cumpla su función con eficacia. Podemos encontrar tres tipos de kit antipinchazos siendo los siguientes:
Kit estándar de reparación
Es una masilla que se introduce en el pinchazo y provoca la vulcanización y cierre del mismo, haciendo que se tapone la zona del pinchazo y se quede reparado.
Este tipo de kit se utiliza mayoritariamente cuando el neumático ha pisado un clavo y al localizarlo y sacarlo se introduce esta masilla con un punzón y con aire en el interior del neumático, siendo una reparación rápida y segura, aunque un poco agresiva para la estructura del neumático al tener que atravesar todas las capas metálicas y de caucho del neumático para introducir dicha masilla.
Kit de reparación con espuma
El vehículo incorpora un bote que contiene espuma la cual se introduce por la válvula de inflado de aire y rellena interiormente el neumático sellando el mismo y reparando el pinchazo.
Kit de reparación con compresor
El kit incorpora un líquido que se introduce por la válvula de inflado del neumático y a continuación, se infla con el compresor que incorpora conectado al mechero del vehículo.
Con el kit antipinchazos conseguimos tener más espacio para el maletero al no incorporar rueda de repuesto, es más barato que llevar una rueda de repuesto normal o de galleta, pero por el contrario solo se puede utilizar ante una emergencia, ya que, si el neumático sufre un pinchazo en el flanco (lateral), la reparación puede ser que no funcione, destacando que el kit antipinchazos es de un solo uso y para pinchazos pequeños.
¿Sabes los pasos a seguir para utilizar los kit de reparación de pinchazos?
En primer lugar, hay que ponerse guantes porque el líquido es corrosivo y tenemos que tener precaución al manipularlo.
- A continuación, quitaremos el tapón de la válvula de la rueda y quitaremos con el útil, el obús (evita que el aire del interior del neumático salga al exterior).
- Si tenemos un kit manual, abriremos el bote y lo conectaremos con el tubo que trae a la válvula del neumático para introducir el líquido que tiene en el interior, para a continuación poner el obús y volver a inflar el neumático a la presión que recomienda el fabricante.
- Si el kit de reparación es de masilla, hay que realizar un agujero mayor con el punzón que incorpora y sin sacar el punzón para que el aire no se salga, colocamos la mecha o masilla en el inyector que incorpora. Al sacar el punzón metemos rápidamente el inyector con la mecha o goma y al sacarlo giramos media vuelta el inyector y se queda sellado el pinchazo. A continuación, se corta el resto que sobra de mecha y se rellena el neumático de aire con el compresor.
- Cuando el kit es automático incorpora un líquido que se introduce por la válvula de inflado del neumático y a continuación se infla con el compresor que incorpora conectado al mechero del vehículo y con el motor en marcha para que la batería no sufra mucha descarga.
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