Para rellenar el hueco que quedaba por debajo, surgieron los microurbanos: una categoría de automóviles con un DNI muy claro; gamas con poco donde elegir, apenas 3,6 m de longitud y precios que, con descuentos oficiales incluidos, parten por debajo de los 8.000-. Este último dato, el de su bajo coste de adquisición, ha propiciado que modelos como el Citroën C1, el Fiat Panda o el Renault Twingo se estén poniendo de moda, consiguiendo ser los únicos vehículos cuyas ventas, con la actual crisis, no caen en picado. Un segmento al que rápidamente se están sumando marcas como Nissan, que a partir de ahora va a completar su oferta con un automóvil más pequeño, básico y barato que su actual Micra. Nos referimos al Pixo, que tiene cinco puertas, 3,56 m de largo y 1,60 m de ancho y cuyo precio de partida es de 7.500- –sin descuentos, porque tampoco los necesita y que puede convertirse, para muchos, en la forma más asequible de acceder a un coche nuevo y, para otros, en una alternativa barata como segundo automóvil que, hasta ahora, no habían considerado. Con todo ¿cumple los mínimos exigibles a un vehículo moderno por seguridad, prestaciones o equipamiento?.
Por dentro y por fuera
Lo primero que sorprende al entrar al Pixo es- el gran ángulo de apertura de todas sus puertas, que permite un acceso cómodo al interior. Una vez dentro, la amplia superficie acristalada ofrece una agradable sensación de espacio.
El salpicadero tiene un diseño muy sencillo -aunque no tanto como el de un Citroën C1- y está fabricado íntegramente en plásticos duros. Eso sí, los ajustes entre las distintas piezas son buenos, por lo que su calidad es similar a la de un Kia Picanto pero peor que la de un Renault Twingo. La ergonomía es correcta: no dispone de muchos mandos o botones, pero todos los que hay están bien ubicados.
Lo que sí es mejorable es la instrumentación: el conductor sólo cuenta con un velocímetro, un cuentakilómetros y un indicador de combustibl pero carece de cuentarrevoluciones, termómetro de agua y, por supuesto, ordenador de a bordo -un Fiat Panda sí los ofrece-.
Uno de los -trucos- para que el Pixo cueste tan barato es su mínima dotación de equipamiento de serie. De hecho, su acabado básico, denominado Visia, cuenta como elementos más destacables con cuatro airbags, dirección asistida o ABS -en este aspecto está a un nivel similar al de las versiones básicas de Citroën C1 o Renault Twingo, pero es peor que un Peugeot 107-; lo malo es que no lleva -ni los contempla en opción- radio CD, elevalunas eléctricos, cierre centralizado -aunque si puede montar bajo pedido el aire acondicionado por unos 750 –.
Quien los quiera, debe gastarse unos 1.000 – más aprox. y adquirir el acabado Acenta, que incluye esos elementos de serie y que es el único que, por 600 -, dispone de un pack de seguridad compuesto de ESP y airbags de cortina -elementos opcionales también en sus rivales-.
El puesto de conducción está ligeramente elevado y ofrece una buena visibilidad. Los asientos, con los reposacabezas integrados, son cómodos, aunque la banqueta es estrecha y la palanca para regular el respaldo es algo imprecisa. El volante, como en todos sus rivales, sólo se puede regular en altura.
Está homologado para cuatro plazas, por lo que no hay problemas de anchura; el espacio para las piernas es suficiente -eso sí, la banqueta es corta-, mientras que la altura es correcta- si no mides más de 1,80 m. Tanto los anclajes Isofix -para colocar una silla de niño como los reposacabezas son de serie, aunque estos
Su capacidad, medida hasta la bandeja -de serie-, es de 129 litros; se sitúa lejos de los 206 l de un Fiat Panda o, incluso, de los 220 l de un Smart Fortwo. Además, la boca de carga queda alta con respecto al suelo y el portón -que sólo se puede abrir introduciendo la llave en la cerradura- no es muy amplio. Al menos, incluye una rueda de repuesto de emergencia.
El Nissan Pixo tiene un hermano casi gemelo: el Suzuki Alto. Se distinguen por los logos, los faros delanteros y traseros, la parrilla frontal y por las protecciones negras de los paragolpes del Nissan. Ambos se fabrican en Nueva Delhi -India-.
Los retrovisores son muy grandes y proporcionan una buena visibilidad, pero producen ruidos aerodinámicos; en el acabado Visia van en negro.
El haz de luz de sus faros es sólo correcto; el acabado Visia no puede llevar antinieblas delanteros y ningún Pixo ofrece xenón.
La parte superior de los faros delanteros tienen una protuberancia que, según Nissan, sirve como punto de referencia al conductor a la hora de aparcar y así evitar pequeños roces.
Cómo va
El Pixo cuya plataforma deriva de la que emplean el Suzuki Splash o el Swift- destaca, como todos sus rivales, por sus cualidades en ciudad; en ese ‘ambiente’, la suspensión absorbe las irregularidades del asfalto con suavidad, el radio de giro es reducido y el motor 1.0 tricilíndrico gasolina con 68 CV -que transmite ciertas vibraciones- acelera con rapidez, ayudado por un cambio manual de cinco velocidades cuya palanca tiene un tacto suave y queda a mano.
Veredicto
Ficha técnica y gama 2009
| Nissan Pixo 1.0 Visia | |||
|---|---|---|---|
| Motor | Gasolina, tres cil. en linea | Neumáticos | 155/65 R14 |
| Cilindrada | 996 cc | Nº puertas | 5 |
| Potencia | 68 CV (50 KW) a 6.000 rpm/td> | Depósito | 35 litros |
| Par | 9,1 kgm (90 Nm) a 3.400 rpm | Tamaño | 356x160x147 cm |
| 0 – 100 km/h | 14 seg. | Peso | 855 kg |
| Tracción | Delantera | Maletero | 129 litros |
| Cambio | Manual de cinco velocidades | Euro NCAP | |
| Consumo | 4,4 l/100 km | CO2 | 103 g/km |
| De serie | (Active)ABS, cuatro airbags, dirección asistida, anclajes ISOFIX, llantas de chapa de 14», volante ajustable en altura. | Opciones | Pintura metalizada -150 -, aire acondicionado -70 – |
| LA GAMA 2009 | ||
|---|---|---|
| 1.0 | 68 CV | 7.500 – / – pta |
Lo que otros no te cuentan
Seguro.El precio del seguro a todo riesgo del Pixo en Mutua Madrileña es de aprox. 550 – para un conductor varón que resida en Madrid y con mas de 10 años de tener carnet.
Mantenimiento. El Pixo superará las revisiones cada 20.000 km o cada año, lo que antes ocurra. La primera revisión tendrá un coste medio aproximado de 90 -.
Garantía. ElPixo ofrecerá , de serie, tres años de garantía sin límite de kilometraje y 12 años anticorrosión.
Suspenciones muy simples. El Pixo emplea un esquema de suspensión muy similar al de todos sus rivales: una eficaz suspensión de tipo independiente delante y una sencilla y tradicional de eje torsional detrás; el resultado es bueno.
Automático. Por 600 -, y únicamente en el acabado superior Acenta, el Pixo ofrece una sencilla caja automática de sólo cuatro velocidades; interesa sólo si pretendes usar el coche en ciudad principalmente.
Ecológico. Este Nissan sólo emite 103 gr/km de CO2, lo que hace que quede exento de pagar el impuesto de matriculación y permita acogerse al Plan Vive. Entre sus competidores, sólo el Smart Fortwo diesel es más ecológico -88 gr/km-.
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