
Retoques muy sutiles
El paragolpes delantero ha sido rediseñado, así como la parrilla y los faros, que se integran en la parrilla de nuevo cuño. Los antinieblas también se han modificado y adoptan una posición más baja, a la vez que los pilotos traseros incorporan tecnología LED. La paleta de colores se ha ampliado con la llegada de nuevas tonalidades y las ruedas disfrutan de unas llantas de aleación de 17 pulgadas con un diseño nuevo.
Por dentro los cambios son menos llamativos, aunque podemos destacar una guantera climatizada, reposacabezas central, una instrumentación modificada y pilares recubiertos con plásticos del mismo tono que el salpicadero.
Con versiones 4×2
La gama mecánica se ampliará con la llegada de un bloque de dos litros para una versión de tracción delantera, y el resto de motores -sobre todo los diésel- mejorarán su eficiencia y sus cifras de emisiones.
En este apartado, quizá lo más interesante sea la introducción del Advanced Hill Descent Control, un dispositivo electrónico que regula la velocidad de descenso entre 4 y 15 km/h. De esta forma podemos descender pendientes muy pronunciadas sin miedo a perder el control del vehículo.