En el número 148 de Autofácil, como respuesta a un lector que pedía vuestra opinión sobre qué coche comprar a su hijo -que acababa de sacarse el carnet y quería un VW Golf IV GTI 1.8T 150 CV de V.0.- le contestabais, con la mejor intención -y dada vuestra experiencia-, que adquiriese un coche de menor cilindrada y potencia que el citado Golf pero… de segunda mano.
Juan Molina
¿El motivo de mi decisión?
Que, en su momento, mi mujer y yo realizamos la misma elección y le compramos a nuestro hijo un vehículo V.0. Desgraciadamente, sufrió un accidente con consecuencias fatales para nuestro hijo y sus acompañantes y, aunque ya ha pasado mucho tiempo, ni mi mujer ni yo lo olvidamos. Por eso, y con el máximo respeto a cualquier decisión u opinión, yo recomendaría encarecidamente a ese padre que, si puede, le compre un automóvil nuevo, debido a que en la actualidad en el mercado existen modelos a unos precios bastante asequibles y, sobre todo, con unos sistemas de seguridad mejorados que, en caso de accidente, protegerán la vida de su hijo. Sin más, daros las gracias por vuestra revista. Juan Molina, E-mail
►Estimado Juan. Ante todo, lamentamos muchísimo vuestra experiencia. Compartimos plenamente tu preocupación por la seguridad de los automóviles y habrás comprobado que es máxima para nosotros. Es más, en nuestra respuesta indicábamos al lector que su hijo adquiriera un vehículo ‘más tranquilo’ que el VW 1.8 T GTI de 150 CV en el que estaba interesado porque «un coche con motor turbo de gasolina y 150 CV […] nos parece demasiado potente y rápido para un conductor novato». Asimismo, no tendríamos inconveniente en haberle recomendado un coche nuevo pero, en esta ocasión, el presupuesto era el condicionante principal para tener que aconsejar la compra de un modelo de segunda mano.
