El nuevo Opel Adam Rocks se encuentra en la fase final de su desarrollo antes de salir al mercado, algo que sucederá durante el mes de noviembre. Mientras tanto, el pequeño crossover urbano alemán se ha encerrado en el laboratorio acústico de Rüsselsheim (Alemania) con el objetivo de aumentar el placer de conducción y reducir los niveles de sonoridad al máximo.
La primera tarea del equipo fue elaborar una lista detallada que comprendía los ruidos y vibraciones en todos sus espectros: desde la suavidad del motor, la apertura del techo abatible, hasta el sonido de las puertas al cerrarse. Dichos elementos han sido evaluados en el laboratorio acústico de Opel, que se asemeja a un estudio de radio (techo y paredes insonorizadas, multitud de micrófonos?)
Durante la prueba, el Adam Rocks se colocó sobre unos rodillos para simular y producir la misma resistencia que en condiciones reales, incluyendo el viento y calidad de rodadura. A diferentes velocidades, bajo condiciones controladas, e independientemente de la climatología, los ingenieros evaluaron el comportamiento del motor 1.0 ECOTEC de 95 y 115 CV en varios regímenes, incluyendo el funcionamiento del sistema Start/Stop.
Los resultados mostraron que tanto los niveles de ruido como de vibraciones, así como su suavidad de rodadura, está por encima incluso de muchos motores de cuatro cilindros.
