Cómo organizar bien el maletero del coche

A la hora de cargar el maletero, resulta de vital importancia hacerlo de la forma correcta, tanto para aprovechar al máximo su espacio como por cuestiones de seguridad. Aquí podrás ver cómo hacerlo, así como aprender algunos consejos para cuando el maletero se te queda corto, viajas con una mascota, transportas bicicletas...


¿Qué coche tienes?

Si tienes uno con portón

Los coches con carrocería de cinco puertas o familiar son los mejores a la hora de cargar el equipaje por su boca de carga de generoso tamaño. Además, debido a su buena accesibilidad, resulta cómodo instalar un organizador de maletero -desde 14 euros aprox.- para ordenar objetos pequeños y que ocupen menos espacio.

Si tienes un todoterreno, todo camino o monovolumen

Aprovechando la generosa altura de los maleteros de estos coches, puedes colocar las maletas en posición vertical, de manera que te cabrán varias en paralelo. Esto es una buena solución para, sobre todo, cuando llevas los siete asientos ocupados.

Si tienes un microurbano o un deportivo

Si el maletero es pequeño, puedes llevar parte del equipaje en el interior del vehículo, pero sólo si va convenientemente sujeto. De lo contrario, te expones a una multa de 80 euros y al peligro de que el equipaje te golpee en caso de accidente. Puedes transportar alguna maleta o mochila en los asientos traseros, pero asegúrate de que va bien sujeta: lo ideal es que la coloques encima de uno de los asientos y abroches el cinturón de seguridad.

Si tienes un vehículo de ‘tercer volumen»

La boca de carga de los coches de tres volúmenes -es decir, los de dos o cuatro puertas- suele ser siempre bastante pequeña, por lo que es conveniente que viajes con maletas no muy voluminosas -en estos casos, es mejor llevar seis compactas que tres grandes-. Además, manipular la carga no es muy cómodo, pues en los modelos con más maletero es posible que incluso te cueste alcanzar el equipaje que coloques más al fondo.

MAletero con equipajes

Así es el maletero perfecto

  • 1.- Capacidad: En un urbano debe rondar los 300 litros; en un compacto los 390 l; en una berlina los 480 l; y, en un monovolumen o en un todo camino, los 520 l.

  • 2.- Formas: Deben ser lo más regulares que sea posible, es decir, ´cuadrado´ y sin recovecos para que sea fácil acoplar el equipaje.

  • 3.- Boca de carga: Lo ideal es que sea cuanto más grande mejor, así como que el borde de carga se sitúe lo más cerca del suelo para facilitar la introducción de la carga.

  • 4.- Accesorios: Muchos modelos ya incorporan redes y ganchos para sujetar objetos pequeños. Son una buena solución para evitar que, durante la circulación, vayan dando ´bandazos´ dentro del maletero.

Principios básicos

  • Coloca las maletas más grandes y pesadas en la parte baja del maletero, pegadas a los respaldos de los asientos traseros y, en la medida de lo posible, en una zona centrada para no desequilibrar el peso. Eso sí, si, por ejemplo, en los asientos traseros viajan dos personas y una pesa claramente más que la otra, puedes ´compensarlo´ colocando la carga del maletero en el lugar opuesto para que así el peso del vehículo vaya equilibrado. Después, termina de rellenarlo con el resto de objetos de más a menos pesados y voluminosos.
  • En los coches con bandeja cubremaletero -es decir, fundamentalmente, los de tres o cinco puertas-, no es aconsejable que la retires para ganar espacio ya que, en caso de accidente, la carga podría invadir el habitáculo y dañar a los ocupantes.
  • Si las plazas traseras van vacías, es bueno que abroches los cinturones de seguridad. De esta manera, en caso de choque frontal, evitarás que el equipaje ´derribe´ los respaldos traseros e invada el habitáculo.
  • En un coche, lo mejor es que las maletas que emplees no sean rígidas, ya que si no lo son resulta más fácil que se adapten a las formas del maletero.
  • Si tienes objetos que pudieras necesitar en un momento determinado del viaje y siempre que no sean muy pesados -como, por ej., un cochecito de bebé-, colócalos en la parte más cercana a la boca de carga para que te sea más fácil acceder a ellos.

¿Cómo transportar a tu mascota?

Lo ideal es hacerlo empleando un transportín o jaula específica para animales -desde 30 euros- y colocarlo en algún lugar donde vaya sujeto como, por ejemplo, en el suelo del vehículo entre uno de los asientos delanteros y los traseros. Si la mascota es un perro, otra opción es utilizar un arnés de seguridad específico para perros -aprox. 15 euros-, que se engancha en el anclaje del propio cinturón del coche y evita que el animal salga despedido en caso de frenazo o accidente. Asimismo, en los coches de tres o cinco puertas, puedes llevar al perro en el maletero, aunque es conveniente que también lo sujetes con el arnés de seguridad y que coloques una red separadora entre el maletero y el habitáculo -desde 40 euros-. Por último, si tu perro es muy grande o viajas con varias mascotas, lo mejor es llevarlos en un cofre externo porta-perros, que se enganchan a la bola de remolque del vehículo y cuestan unos 680 euros. En último caso, la mayoría de empresas de mensajería -MRW, Seur€- cuentan con un servicio específico de transporte de mascotas: para un viaje de vacaciones de 450 km, desde aprox. 120 euros.

¿Cómo transportar tu bici?

Existen tres tipos de portabicicletas:

1.- DE TECHO

Es la mejor solución para berlinas, o aquellos casos en los que se necesite un acceso rápido o frecuente al maletero. Por ello, son recomendables para transportes esporádicos de bicicletas y para usuarios que sólo necesitan llevar una o dos bicis como máximo. Eso sí, exigen la instalación de unas barras de techo para el coche -desde 35 euros- y, ojo, si pasas por lugares bajos -párkings…- puedes golpear las bicis. Precio: desde 85 euros.

Para berlinas

Los + usados

2.- DE PORTÓN

Se trata de un portabicicletas que se coloca anclado a la puerta de acceso al maletero de los coches con portón. Son la opción más utilizada por todos los usuarios, por comodidad, ya que no requiere la instalación de una baca o bola de remolque, y por precio -desde 40 euros-. Eso sí, perjudica tu visibilidad posterior y, si transportas muchas bicicletas y la carga sobresale más de un 15% de la planta del vehículo -o sea, por los lados, por delante o por detrás-, recuerda instalar una placa de señalización V-20, que cuesta 21 euros aprox., tal y como establece el Código de Circulación. Precio: desde 30 euros.

 

 

3.- DE BOLA

Se fijan sobre la bola de enganche y son la opción más cara -además de exigirte la instalación de la propia bola, que ya supone unos 190 euros-… pero la más cómoda, ya que permite colocar el

Los más cómodos

Si el maletero se te queda pequeño, existen algunas soluciones…

Ojo, si colocas el equipaje en el exterior…

Asegúrate de que va bien sujeto porque, si te para la Guardia Civil y comprueba que no lo está, pueden multarte con 200 euros. Por otro lado, podrían imponerte una sanción de la misma cuantía si sobrepasas el peso máximo autorizado del vehículo -viene inscrito en la ficha técnica-. Además, si la carga se cae y daña tu vehículo, tu seguro no se hará cargo de la reparación porque interpretará que el daño se ha producido por una negligencia tuya.

 

Cofre de techo

Se trata de baúles rígidos que se colocan en el techo y que ofrecen una capacidad de carga extra que oscila entre los 200 y los 650 litros. Para sujetarlo necesitarás una baca -aprox. 35 euros aparte-.
Precio: desde 85 euros.
Pros: Es la forma más rápida y fácil de aumentar el espacio de carga. Además, instalarlo es muy sencillo: apenas te llevará 15 minutos.
Contras: Cargarlo no resulta muy cómodo, cuando no lo usas ocupa mucho espacio y, como empeora la aerodinámica, el consumo del coche a 120 km/h aumenta en torno a un 12%.

Portaequipajes de portón

Es una especie de ´mochila´ que se coloca en el portón trasero de los coches de tres o cinco puertas. Ofrece entre 190 y 270 litros de capacidad y se sujeta mediante unas correas que se enganchan al propio portón.
Precio: desde 75 euros.
Pros: Es barato y fácil de colocar. Además, cuando no se usa ocupa poco espacio.
Contras: Afecta negativamente a la visibilidad posterior. Asimismo, no suelen tener cerradura y no es conveniente cargarlo con más de 12 kg de peso.

La última moda: envía el equipaje por correo

Hay muchas compañías que ofrecen un servicio de transporte de equipaje a tu destino, como Seur, MRW… y también otras más pequeñas -encontrarás cientos de ellas si escribes ‘envío de equipaje’ en la barra de búsqueda de Google-.
Precio: Entre 12 y 90 euros, en función de la distancia y el tamaño de los bultos.
Pros: Es muy cómodo, pues incluso te recogen las maletas en casa. Además, te permite viajar en un coche más pequeño o con las 7 plazas ocupadas.
Contras: No es barato y te obliga a sincronizar tu viaje con el envío de equipaje.

Baúl trasero

Se colocan en la parte trasera del vehículo, por fuera, y se enganchan a una bola de remolque -aprox. 190 euros aparte-. Ofrecen una capacidad añadida de entre 400 y 800 litros.
Precio: desde 380 euros.
Pros: No perjudica tanto la aerodinámica del vehículo como el cofre de techo.
Contras: Te será más difícil maniobrar con tu coche. Además, necesitarás instalar una placa V-20 -un cuadrado de 50×50 xm con rayas diagonales rojas y blancas- para señalizar la carga, que cuesta unos 21 euros.

Remolque ligero

Son los que tienen una masa máxima autorizada de 750 kg y que, por tanto, no necesitan una matrícula propia. Además, no precisarás un permiso de conducir específico para remolcarlos. Ofrecen una capacidad extra de hasta 800 litros.
Precio: desde 280 hasta 1.250 euros.
Pros: Gran capacidad de carga.
Contras: Te será más difícil maniobrar. Velocidad limitada a 90 km/h. Cuando no lo utilices, necesitarás un espacio grande para guardarlo.

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