En los últimos meses y semanas, los ciclistas se han convertido, por desgracia, en uno de los protagonistas en las carreteras españolas debido al repunte de la siniestralidad en las carreteras españolas de este colectivo. Tanto es así que hace apenas un mes, la Dirección General Tráfico, convocó de forma urgente al Comité de Seguridad Vial para abordar la aprobación de un Plan especial de protección y seguridad para vías ciclistas.
Entre las medidas de ese plan presentado por la DGT estaba el análisis de los accidentes registrados para tener una información más detallada de la siniestralidad, una nueva campaña de concienciación, un plan especial de vigilancia con medios terrestres y aéreos para la protección de los ciclistas, mejoría del conocimiento de la movilidad ciclista para aumentar la seguridad en determinadas vías o tramos, etc.
Por si todo lo anterior no fuese suficiente, el Gobierno quiere ahora ir un paso más allá y ha presentado una Proposición de Ley para endurecer las penas a los conductores que atropellen a ciclistas. La nueva Ley contempla la posibilidad de aumentar de cuatro hasta nueve años la prisión para aquellos conductores que causen varias víctimas mortales, así como la de crear un delito específico por el abandono del lugar del accidente.
En definitiva, la iniciativa de Propuesta de Ley del Gobierno pretende mejorar la definición de imprudencia grave y muy grave, de la que luego se derivarán las penas, considerando como tales la conducción a velocidad excesiva o con consumo de drogas y altas tasas de alcohol.
El año 2017 está siendo especialmente duro para los ciclistas. Durante los primeros seis meses del año al menos 26 ciclistas han perdido la vida en las carreteras españolas, lo que supone un aumento con respecto al mismo periodo del año anterior.
