La prueba rusa, con salida en la ciudad de Saint Petersburg el día 11 y llegada en Sochi el 19, será la primera toma de contacto de Vila con el equipo De Rooy y el nuevo camión Iveco con el que también disputarán el Dakar. Este será el test perfecto para poner a punto y adaptarse al potente Iveco con el que la formación holandesa pretende desbancar de la victoria al equipo Kamaz en el Dakar.
En el Rallye Ruta de la Seda estarán presentes dos camiones del equipo de Rooy, el de Pep Vila y su copiloto Moi Torrallardona, y el del holandés Hugo Duisters. Gerard de Rooy no podrá tomar la salida por pre inspección médica, ya que se está recuperando de un accidente para estar al cien por cien para el próximo Dakar. El objetivo del equipo es probar el máximo de cosas aquí, y llegar al Dakar con los deberes hechos; la carrera la realizaran a modo de test y, cómo no, para que los españoles puedan hacerse al máximo a su nueva montura y conseguir los mejores reglajes. El resultado no es lo más importante si bien el principal rival de los Iveco, el equipo Kamaz, estará presente en Rusia, este será el primer duelo de los dos equipos para mostrar sus cartas de cara al Dakar.
Para Pep Vila, el Silk Way Rally será: «Un test definitivo para el Dakar, con lo apretado de las fechas no podremos hacer nada más y es por esto que la prueba será vital para poder hacernos al nuevo Iveco, dejar todos los reglajes a punto y probar el máximo de soluciones durante toda la carrera, especialmente unas nuevas suspensiones y caja de cambios, así como ver la fiabilidad que tenemos. El resultado no será lo más importante ya que será vital acabar la carrera para hacer el máximo de kilómetros».
El Silk Way Rallye se disputará a lo largo de nueve días y ocho etapas cronometradas, en total 4.000 kilómetros de los cuales más de 2.000 serán cronometrados.
