Poco después de estrenarlo tuvieron que arreglar el retrovisor interior porque se descolgaba… aunque lo más grave sucedió a los tres meses, y cuando el coche sólo tenía 2.000 km. Fue, entonces, cuando comencé a notar que la dirección tenía mucha holgura y hacía ruidos extraños. En el taller oficial ya le han cambiado dos veces la cremallera de dirección, pero al poco tiempo vuelve a estar igual. Allí me dicen que el resto de los elementos de la dirección -bomba, columna, volante…- están en perfecto estado y que la avería podría deberse a un defecto… ¡en el bastidor! Mi 307 ya no me transmite seguridad y tampoco pretendo venderlo para -endosárselo- a otra persona. ¿Me ayudáis?
Peugeot nos asegura que se le ha vuelto a sustituir la cremallera de dirección… aunque esta vez siguiendo las instrucciones y con la supervisión del departamento técnico de la marca. Por su parte, Antonio nos comenta que, de momento, no se ha vuelto a presentar holgura ni ruidos de ningún tipo*.
*Como el 307 está en garantía se ha solucionado sin coste alguno para él.
