Primer contacto con el Audi S6

El Audi S6 es la versión más deportiva de la gama A6, al menos hasta la llegada del modelo RS6.


Incorpora el mismo motor que el S8, aunque con modificaciones en los turbos y en la gestión electrónica que reducen la potencia en 100 CV y 100 Nm.Este propulsor 4.0 V8 TFSI entrega 420 CV y 550 Nm de par en el S6 e incluye el sistema Cylinder on demand -o de desconexión de cilindros-. Esto funciona de la siguiente manera: cuando no es necesaria toda la fuerza del motor -por ejemplo, llaneando en autopista a velocidad moderada-, un perfil de leva totalmente cilíndrico anula el movimiento de las válvulas de cuatro de los ocho cilindros, a la vez que deja de suministrárseles combustible inyectado. De esa manera, el coche circula ‘a modo cuatro cilindros’. Es lo mismo que vimos en el A1 1.4 Turbo de 140 CV pero con el doble de cilindros. Lo bueno de este sistema es que obtiene un consumo bastante razonable: homologa 9,7 litros aunque, en la práctica, esa cifra se eleva a unos 13 l/100 km, lo cual está bastante bien teniendo en cuenta que se trata de un motor 4.0 V8 de gasolina.

Además, el S6 incorpora aluminio en las puertas, capó, portón del maletero, aletas… esto reduce el peso del vehículo en un 20%, según la marca.

El trabajo de diseño merece su reconocimiento, pues combina toques deportivos con la clase y distinción que se espera de un Audi de 85.300 €, que es su precio en España -el S6 Avant cuesta 87.960 €-. Lleva de serie llantas de 19-, faros bixenón, climatizador de cuatro zonas… En opción existe un muy buen Head Up Display -proyecta la velocidad y las indicaciones del navegador en el parabrisas-, un dispositivo bastante importante dado lo que corre este coche.

En cuanto a espacio o calidad de materiales no hay nada que no conozcamos ya del A6. Eso sí, los revestimientos del salpicadero pueden ser de carbono o combinar aluminio y madera de una forma muy atractiva. Por otro lado, cuenta con asientos deportivos de cuero que sujetan el cuerpo francamente bien y que, en opción, pueden llevar ventilación. Por último, el perímetro del habitáculo dispone de unos pequeños micrófonos que sirven para algo muy curioso: cuando el dispositivo Cylinder on Demand actúa, dejando el motor funcionando en 4 cilindros, el ruido que el propulsor genera es más ‘feo’ que cuando va en ocho cilindros. Estos micrófonos se encargan de emitir un contrasonido a través de los altavoces para que, acústicamente, prácticamente ni se note el paso de 4 a ocho cilindros y viceversa. Aparte, como en cuatro cilindros el motor inevitablemente vibra más, el propulsor está montado sobre unos soportes activos que, mediante un fluido hidráulico, unos actuadores electromagnéticos y una bobina, son capaces de mover una membrana que contrarresta esa vibración del motor.

La sensación al conducir un S6 no es la de un auténtico deportivo: es un coche práctico por espacio, con una calidad de gran nivel, bien equipado, corre mucho y tiene un consumo moderado. Encaja en lo que podría definirse como un deportivo ideal para uso diario. Es rapidísimo, pero la percepción del conductor es que corre algo menos de lo que realmente corre. Por otro lado, el cambio automático de siete marchas es un ejemplo de rapidez de funcionamiento aunque, en conducción deportiva, es ligeramente brusco. Respecto a la tracción Quattro, simplemente perfecta. La capacidad de tracción es enorme en cualquier tipo de situación. Si encima el coche lleva el diferencial trasero deportivo opcional, entonces ya la eficacia en curvas es realmente sorprendente.

La insonorización del habitáculo es impecable, casi sin notar el aire incluso a alta velocidad, y el ruido del motor llega muy poco al interior.

En cuanto a la suspensión, incorpora amortiguadores de aluminio y dureza variable mediante el Audi Drive Select. Este dispositivo altera el carácter del coche –dirección, suspensión, respuesta del motor, cambio y ESP-. La dirección es rápida y precisa aunque peca de tener demasiada asistencia.

En conclusión, el S6 se acerca más a un A6 muy rápido que a un automóvil deportivo. Le faltan sensaciones al volante, pero el coche es muy rápido, su tracción Quattro proporciona una capacidad de tracción enorme y es una referencia por calidad de materiales. Además, su precio no es desorbitado para lo que ofrece.

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