Por ejemplo, todos los neumáticos Energy Saver+ incluyen en su banda de rodadura unos insertos para eliminar la electricidad estática del vehículo.
La huella de los nuevos Energy Saver+ aumenta un 10% respecto a modelos anteriores, por lo que logra mejores valores de agarre y frenada. Además, se estima un ahorro de combustible de unos 60 litros durante un uso de unos 45.000 kilómetros con respecto a la gama anterior. Lo que significa un ahorro de unos 200 litros con respecto a un neumático que se ajuste al nuevo mínimo reglamentario propuesto en el nuevo etiquetado europeo de neumáticos.
Si nos atenemos al nuevo etiquetado de neumáticos, en los que se indican sólo tres parámetros -frenada en suelo mojado, eficiencia energética y nivel de ruido – Michelín logra unos muy buenos valores, pero no ha buscado una etiqueta -de exposición-. Conscientes de que el 70% de los accidentes se producen en suelo seco y que los accidentes más graves se producen en curva, han apostado decididamente por la seguridad. Por ello la gama Energy Saver+ es un compromiso entre seguridad, economía y confort.
Respecto a la gama Agilis+, Michelín ha actuado con los mismos criterios de seguridad, economía y confort que en la gama Energy Saver+. En este caso el ahorro de combustible se cifra en unos 270 litros con respecto a un neumático que cumpla el mínimo reglamentario establecido por la etiqueta europea.
