El nuevo D-Max ha experimentado un crecimiento sustancial -pasa de los 5,03 metros de longitud a los 5,29-, para equipararse a otros modelos actuales como Nissan Navara, Toyota Hilux, Ford Ranger o Volkswagen Amarok, lo cual redunda en mayor espacio en la cabina para los ocupantes de las plazas traseras.
La mecánica que equipará, por el momento, el D-Max es un turbodiesel tetracilíndrico de 2,5 litros que rinde 163 CV; la misma cifra que arrojaba el anterior 3.0 de la firma japonesa, pero con una sustancial rebaja de consumo. El D-Max promete unos consumos de 7,4 litros cada 100 kilómetros en ciclo combinado, para la versión equipada con caja manual. En otros mercados están disponibles una versión del motor 2.5 con 115 CV y una variante actualizada del 3.0 que montaba la anterior generación del D-Max, cuyo rendimiento llega a los 178 CV.
Aunque todavía no hay información de cómo queda conformada definitivamente la gama, así como los precios, sí es seguro que el nuevo D-Max estará disponible en tres carrocerías -cabina simple, cabina ampliada y doble cabina- y con tres niveles de acabado que responderán a las denominaciones Satellite, Planet y Solar.