El mismo método utilizan los constructores chinos… con una pequeña diferencia: si pasados los siete días de prueba abren el coche y el gato ha desaparecido, comienzan a plantearse la necesidad de mejorar la estanqueidad. La historieta, pese a su toque macabro, no deja de ser un chiste divertido que, sin embargo, nos ha hecho pensar muy seriamente en cómo podríamos comprobar nosotros mismos la calidad y las cualidades de nuestro coche sin recurrir a talleres especializados… ni poner en riesgo la vida de nuestros animales de compañía.
Dicho y hecho, el Equipo de Pruebas de autofácil se ha exprimido el cerebro hasta elaborar un completo y meditado informe que, en forma de cuestionario con 167 apartados, valora las virtudes y defectos del modelo examinado en cuatro grandes aspectos: carrocería, habitáculo, motor y comportamiento dinámico. Siguiendo paso a paso este test podréis analizar la precisión de los ajustes exteriores de puertas y capós, las calidades de los materiales empleados en el interior, así como el esmero en el montaje de los diferentes componentes…
Y ya, con el coche en marcha, descubriréis si el motor ofrece un buen rendimiento, si el cambio es preciso y tiene los desarrollos correctos, si la suspensión presenta una puesta a punto acorde a las prestaciones del modelo- En suma,este mes os ofrecemos la posibilidad de rellenar el cuestionario que encontraréis en páginas interiores… y, a cambio de ‘robaros’ un par de horas a vuestras vacaciones veraniegas, os ayudaremos a constatar hasta qué punto vuestro automóvil es bueno o no. ¡Que lo disfrutéis!