En verano, las averías de motor representan casi la mitad de las asistencias en carretera, seguidas de los fallos de la batería (27,5%), pinchazos (12,1%) y fallos en el sistema eléctrico (5,1%). Más del 91% de las llamadas a la grúa en época estival se debe a averías, mientras que sólo un 7,3% están relacionadas con accidentes de tráfico. Estos datos se extraen del estudio que acaba de presentar Mapfre después de analizar los 2,4 millones de servicios realizados a lo largo de 2010.
En 2010 se incrementaron especialmente las intervenciones en el periodo estival, así como los servicios de asistencia en carretera prestados a vehículos industriales de capacidad superior a 3.500 kg, que crecieron aproximadamente un 50% sobre el año anterior. Según Mapfre, la crisis económica podría estar detrás de este incremento, provocado probablemente por dos factores: aumento de la antigüedad del parque automovilístico y disminución del mantenimiento de los vehículos.
Por este motivo, si vas a viajar en los próximos días es recomendable que realices una revisión en profundidad de tu vehículo, poniendo especial atención al estado de los neumáticos, frenos y suspensiones, elementos que conforman el triángulo de seguridad. Pero tampoco debes perder ojo a los testigos que te indican el estado del motor y la batería. Con el calor, la probabilidad de tener una avería mecánica se dispara. Si no conoces el significado de los testigos, en este reportaje encontrarás los consejos básicos para mantener a tono tu vehículo y qué hacer si se enciende alguno de ellos.