Me estoy planteando cambiarlo por un modelo de ocasión con tracción 4H y cambio manual, ya sea gasolina o diésel, de unos cuatro o cinco años de antigüedad. Los modelos que barajo son el Subaru Forester, el Volvo Cross Country u otros similares que me permitan viajar con tranquilidad con la caravana y que sean fiables mecánicamente. ¿Cuál es vuestro consejo? Me gustaría contar con vuestra opinión, ya que no dispongo de los datos de remolque de ninguno de ellos o de vehículos de similares características.
Jordi Figueres Hubner, La Garriga (Barcelona) Si cambias tu Audi Allroad de 2004 por un Subaru Forester o un Volvo XC 70 de 2008-2009 vas a perder la suspensión neumática y te vas a encontrar con motores algo justos para arrastrar la caravana (entendemos que te refieres a las versiones diésel).
Yo no lo haría salvo causa de fuerza mayor. Si te lo puedes permitir, te recomendamos que busques un todocamino con motor turbodiésel de tres litros. Aparte de los típicos Mercedes Clase M, BMW X3, X5, Audi A4 Allroad, A6 Allroad, Q5, Land Rover Discovery, etc., recuerda que también tienes el Hyundai iX55, del que seguramente podrás encontrar unidades a buen precio, y los Jeep Grand Cherokee CRD de la anterior generación, con motor Mercedes. Nuestro consejo es que descartes todos los 2.0 y 2.2 turbodiésel, por muy buenas cifras de par máximo que ofrezcan. Cualquier 3.0 los superará con creces.
Ten en cuenta que el peso que citas no es ninguna broma; supone del orden del 80 % del peso de los vehículos que propones. Una cuestión está clara: la mecánica debe ser 4×4; supone un plus de agarre y adherencia que ayudará de forma notable a la estabilidad del conjunto caravana-vehículo tractor. Tampoco descartes vehículos todoterreno de tracción total permanente como los Toyota Land Cruiser, Mitsubishi Montero o Land Rover Discovery, por citar algunos.
Estos vehículos pueden arrastrar el peso que comentas sin problemas y, además, están mejor capacitados para acceder al medio rural. La reductora puede sacarte de un apuro si necesitas superar una rampa muy pronunciada con tu remolque.