Según los últimos datos disponibles de la DGT, en el año 2013 fallecieron 46 niños entre 0 y 14 años como consecuencia de un siniestro de tráfico en España. Mejorar la seguridad infantil debe ser una prioridad en las políticas de prevención de accidentes.
Para esto es necesario establecer nuevas normas de uso como la que entró en vigor el 1 de octubre, que incorpora la obligatoriedad de llevar a los niños con estatura igual o inferior a 1,35 metros en las plazas traseras, lo que mejora su seguridad en caso de impacto. Además, es necesario mejorar la formación de los padres, ya que el 90% de los responsables de la seguridad de los niños en el vehículo desconocen la existencia de nuevas normas de homologación.
Una silla de retención para niños reduce hasta en un 75% el riesgo de lesiones en caso de un accidente. Para mejorar la seguridad, cada año se van mejorando las pruebas, los análisis y las evaluaciones de las sillitas, como las que realizan los clubes automovilísticos y con la que se someten a pruebas más exigentes a los productos de venta en el mercado.
RACE considera que proteger a los niños en un coche no debería ser un lujo, y por lo tanto, gravar estos sistemas con el IVA más alto no hace que se mejore e incentive su compra, y por lo tanto su uso.
