Hoy es el día. El 21 de octubre de 2015 ha llegado y con él todos los fanáticos de ‘Regreso al Futuro’, pues nadie olvida que el protagonista de la saga, Marti McFly, eligió esta fecha para viajar al futuro en el ya mítico DeLorean.
Más allá de especulaciones y anécdotas comparativas entre lo que la película predijo en 1989 sobre cómo sería el mundo en 2015 y la realidad actual, hay que hacer mención especial al auténtico artífice de estos viajes de Doc y McFly en el espacio-tiempo; el DeLorean.
El DeLorean
Este vehículo se fabricó en Irlanda ante los problemas de financiación para su fabricación en Estados Unidos. El primer DeLorean DMC-12 salió en 1981 con sus inconfundibles alas de gaviota. En esos dos años en los que la fábrica se mantiene activa, el DeLorean obtuvo un generoso número de fans antes incluso que la película viera la luz. Pero también tenía un problema grave, la fabricación de cada modelo era tremendamente costosa.
Su estética, salida de las manos de una leyenda como Giorgetto Giugiaro, representaba a la perfección las líneas predominantes en los deportivos de la época. En cuanto al rendimiento, la compañia tuvo que reducir a 130 caballos la potencia final para pasar la legislación vigente en Estados Unidos con respecto a la emisión de gases contaminantes, un tema de actualidad.
Finalmente, en 1982, las autoridades británicas cerraron para siempre la fábrica que construía el DeLorean. John DeLorean, el creador y fundador de la compañía, fue arrestado por el FBI por tráfico de drogas. El ingeniero y ejecutivo de la industria del automóvil fue acusado del intento de venta de cocaína por valor de 25 millones de dólares en lo que se suponía un intento desesperado por levantar DeLorean Motor Company.
¿Cómo funcionaba el DeLorean en ‘Regreso al Futuro’?
El DeLorean era, a grandes rasgos, una máquina del tiempo hecha coche. En el cuadro de mandos del vehículos aparecían los llamados ‘circuitos de tiempo’ en los que se indica a una persona que la utilice a dónde va, dónde está y dónde ha estado. Cuando el vehículo acelera a 88 mph (unos 140 km/h), empieza el desplazamiento temporal hasta la fecha marcada. El condesador de flujo, situado en la parte trasera del DeLorean es la herramienta fundamental para que la máquina del tiempo funcione.