En cuanto a maletero, en configuración coupé tiene capacidad para 417 litros, que bajan hasta 211 con el techo desplegado.
Asientos específicos
Por dentro comparte el salpicadero de la berlina, aunque los asientos con sujeción lateral reforzada y los paneles de puerta son específicos del Coupé-Cabrio. También se han creado nuevas combinaciones de tapicería exclusivas para el CC: carbono oscuro, beige claro o bitono carbono-rojo para los asientos de cuero.
En lo que se refiere a ergonomía, el CC aprovecha las mismas soluciones que la berlina y el coupé, es decir, mandos agrupados alrededor del volante y en la consola central, regulación máxima del asiento de 70 mm en altura y de 240 mm en profundidad, sistema que permite recuperar, tras abatir el respaldo, la posición memorizada de ajuste de los asientos y regulación máxima del volante 45 mm en profundidad y 5º en altura.
La tecnología bebe igualmente del resto de vehículos de la gama: tarjeta Renault «manos libres» con condenación por alejamiento, freno de aparcamiento asistido, climatización automática bizona con tres modos (Soft-Auto-Fast), faros bi-xenon direccionales, contador con visualización mixta (digital y analógica), nueva interfaz en color del limitador-regulador de velocidades, sistema de audio «3D sound by Arkamys®», asociado a la conexión Plug&Music (USB, mini-Jack), navegador Carminat TomTom®, etc.
Deflector de viento de serie
Con respecto al Coupé-Cabrio de la anterior generación, el actual ha adelantado 10 cm el travesaño del parabrisas para facilitar la entrada al vehículo y ha colocado un deflector de viento (de serie) detrás de los reposacabezas de la segunda fila. Gracias a esto se consigue limitar las perturbaciones hasta los 90 km/h, algo que se agradece cuando viajan cuatro personas. Para mejorar la comodidad se puede montar de manera opcional una red antirremolinos desmontable, que se coloca detrás de las plazas delanteras.
La rigidez de la carrocería en torsión es un 80% mayor con respecto al Mégane II Coupé Cabriolet.
Hasta 160 CV
La oferta mecánica comprende motores de gasolina y diésel con potencias comprendidas entre los 110 y los 160 CV. Una de las novedades más interesantes es la transmisión automática EDC (Efficient Dual Clutch) de doble embrague y seis velocidades, que mejora el consumo y las emisiones. Éste es el resumen de motorizaciones:
Gasolina
– 1.6 16v 110 CV asociado a una caja de velocidades manual de seis velocidades.
– 1.4 TCe 130 CV, con caja manual de seis velocidades.
– 2.0 16v 140 CV, con transmisión continuamente variable CVT.
Diésel
– 1.5 dCi 110 CV FAP con transmisión automática ague EDC
– 1.9 dCi 130 CV FAP asociado a una caja manual de seis velocidades.
– 2.0 dCi 160 CV FAP con caja manual de seis velocidades.
Seguridad como el resto de la gama
En lo referente a seguridad activa y pasiva, el Mégane CC comparte los mismos mecanismos que la berlina o el coupé: avisador de cinturones desabrochados, sistema de control de la presión de los neumáticos, faros direccionales bi-xenón con orientación de las luces de cruce en las curvas, encendido automático de las luces de cruce, sensor automático de lluvia, limitador-regulador de velocidad, ABS con repartidor electrónico de frenada EBV, sistema de Ayuda a la Frenada de Emergencia, ESC con función de control de subviraje, estructura de deformación programada, arcos de seguridad pirotécnicos que se despliegan automáticamente cuando los captadores específicos detectan la inminencia de un vuelco, cinturones con pretensor y limitador de esfuerzo, airbags frontales adaptativos, airbags laterales bicámara cabeza/tórax/abdomen, airbags antideslizamiento en los asientos delanteros, captadores de choque lateral, reposacabezas con protección cervical, anclajes Isofix, etcétera.
