Renault Twizy: ¿el verdadero futuro de la movilidad urbana?

Vale, no tiene puertas. Tampoco una carrocería completa, ni calefacción. Por si fuera poco, sus dimensiones son mínimas y no pasa de 80 km/h. Todo suma para que muchos conductores no se tomen en serio a esta alternativa urbana pero, ¿se equivocan? Ya te adelanto que sí. El Renault Twizy tiene innumerables 'contras', pero también algunos 'pros' que ningún otro coche te puede aportar.


Puedes comprártelo desde 7.220 euros. Y, si restas las ayudas a la compra de coches eléctricos, que según comunidades autónomas puede superar incluso los 2.000 euros, puedes conducir un Twizy desde menos de 5.000 euros. No, no es ninguna broma. Aún lo ves por la calle y te sugiere cierta jocosidad, pero después de esa apariencia de cuadriciclo, se esconde una solución urbana muy inteligente. ¿Quieres saber por qué?

 

¿Cuáles son las ventajas del Twizy?

 

-Es el coche más barato del mercado.
-No gasta combustible porque es eléctrico
-Puedes recargar su batería en una toma doméstica en 3,5 horas, es decir, menos de la mitad de tiempo que la mayoría de eléctricos ‘grandes’.
-Te permite llevar a un pasajero en el asiento trasero, aunque mejor que no sea muy corpulento.
-Tiene algún elemento de seguridad básico, como el airbag para el conductor.
-Lo aparcarás prácticamente donde te de la gana, pues sólo mide 2,33 metros de largo: ¡36 cm menos que un Smart Fortwo!
-No le afecta el sistema de estacionamiento regulado. Aparcarás en zona verde o azul sin pagar nada.
-Su mantenimiento es prácticamente nulo más allá de los consumibles: neumáticos, frenos… y poco más. -Ningún otro coche del mercado te aporta tanta maniobrabilidad en ciudad.
-Sólo tiene 17 CV. Te parecerán pocos, pero en un coche de 375 kg se desenvuelven con suficiencia.

 

¿Y cuáles son sus inconvenientes?

 

-Está limitado a 80 km/h, de forma que fuera de la ciudad tan sólo es utilizable en circunvalaciones.
-Hay una versión que se puede conducir con carnet de ciclomotor -Twizy 45-, pero está limitada a 45 km/h, por lo que no es nada aconsejable.
-No tiene servofreno ni ABS, de forma que hay que adaptarse al uso del pedal de freno para dosificarlo con precisión.
-No tiene puertas. Hay unas opcionales por 590 euros, pero no cubren por completo. Por ello, si llueve, te mojarás…
-… y pasarás frío o calor, porque no hay calefacción ni aire acondicionado.
-Su autonomía no es para ‘tirar cohetes’. Oficialmente puede recorrer 100 km con una sola carga, pero en la realidad es complicado superar los 80 km. 
-Es un coche razonablemente seguro pero, por pura lógica, no tanto como un automóvil carrozado.

¿Y cuánto cuesta? Bueno, centrándonos únicamente en el Twizy 80, puedes tener un Twizy desde unos 6.000 euros contando con las ayudas a la compra de eléctricos. Sin duda, para nosotros es una solución urbana muy aconsejable, siempre y cuando no vivas en climas muy fríos o de muchas precipitaciones. Y, de momento, ningún fabricante rival de Renault se ha atrevido a hacer nada igual…

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