Renault anuncia el regreso de Alpine con el prototipo A110-50
Estéticamente, el Alpine A110-50 es una actualización del concept car Dezir, con la que se han añadido algunos aditamentos aerodinámicos -un gran alerón trasero, difusor, spoilers, etc-. Ha sido fabricado en fibra de carbono, y entre sus características más particulares destacan el chasis tubular, los amortiguadores Sachs ajustables, las puertas pivotantes… En total, su peso tan solo alcanza los 880 kg.
El motor del A110-50 es un 3.5 V6 de gasolina colocado en posición central, un desarrollo del V6 que ya montan algunos Renault Sport para que entregue 400 CV a 7.200 rpm y 43 mkg a 6.200 rpm. Y es que este Alpine toma muchos elementos del Mégane Trophy, como la distancia entre ejes de 2.625 mm -si bien los anchos de vías son algo mayores que los del Trophy-. Por su parte, la tecnología del volante -que incluye pantalla en color- es la misma que la de los F-Renault 3.5. La transmisión secuencial de seis velocidades con embrague cerámico es totalmente nueva, al igual que la propulsión trasera con diferencial autoblocante.
Para conducirlo habrá que tener mucha destreza, ya que no monta ABS ni control de tracción… y no te podrás olvidar de ponerte el mono de la firma Sabelt y el casco de Ruby. Eso sí, sus grandes neumáticos Michelin serán una ayuda: La medida de los de delante es 245/35 R21, y la de los de detrás, 265/35 R21, y están unidos a unas llantas de 21 pulgadas, fijadas con una sola tuerca centeral.
El nombre procede del antiguo Alpine A110 «Berlinette», y el número 50 con el que termina la denominación del prototipo se debe al 50º Aniversario de dicho modelo.
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