Las preparaciones de vehículos están bastante de moda últimamente. Curiosamente, las empresas dedicadas a modificar coches, tanto estética como mecánicamente, suelen ir a por modelos que ya cuentan con bastante potencia de fábrica. El último ejemplo de ello lo hemos descubierto en el preparador estadounidense Renntech, que se ha olvidado de los típicos muscle cars americanos y le ha metido mano a todo un Mercedes-Benz Clase S.
Más de 100 CV extra
El modelo en cuestión es un Mercedes-Benz S 560, un automóvil que cuenta con un propulsor de gasolina V8 de 4.0 litros que entrega una potencia de 469 CV y un par motor máximo de 700 Nm. Ante este panorama no resulta sencillo mejorar las cifras, pero Renntech ha conseguido aumentar la potencia en más de 100 CV, llegando hasta los 592 CV. A este incremento le acompaña otro del par motor, que se sitúa en 870 Nm.
Debido a la mejoría sufrida por este Clase S, las cifras de aceleración de 0 a 100 km/h y de velocidad máxima también superan a las del modelo de serie. El salido de fábrica presume de 4,6 segundos y 250 km/h -autolimitada electrónicamente-, respectivamente. Sin embargo, las unidades que han pasado por las manos de Renntech llegan hasta los 100 km/h desde parado en 4,2 segundos y recorren un cuarto de milla -0,40 km- en 12,4 segundos.
Más información sobre el Mercedes-Benz Clase S
Además de lo anterior, Renntech puede instalar una suspensión específica -unos 1.205 euros-, algunos elementos decorativos en su carrocería fabricados en fibra de carbono -unos 1.355 euros- o una válvula de descarga especial para su compresor -unos 290 euros-, entre otros.
No resulta muy caro
Es de sobra conocido que la potencia en territorio estadounidense no tiene un precio desmesurado, y esta preparación de Renntech lo vuelve a demostrar. Así las cosas, mejorar la potencia y las prestaciones del Clase S 560 como lo hace el preparador yanqui tan solo cuesta 2.740 dólares, que vienen a ser unos 2.205 euros al cambio.