A lo mejor no resulta fácil reconocerlo, depende de lo que conozcas el original y desde el ángulo que veas este, pero lo que hay «debajo» del Rinspeed Budii era un BMWi3. Lo llevarán al salón de Ginebra 2015 y es toda una «exposición rodante» de las capacidades tecnológicas actuales en el mundo del automóvil.
Budii, derivado de «buddy», amigo o compañero en inglés lleva un buen cúmulo de tecnología en su interior. Mecánicamente sigue siendo el coche eléctrico de BMW que era antes de esta metamorfosis. Pero además de eso Budii es capaz de moverse sólo, de «entregar» el volante a cualquiera de los dos ocupantes y de hacer tu estancia en su interior una experiencia lo más entretenida posible, aunque no conduzcas.
Para empezar, sobre el techo monta una cámara TrackView V2X. Puede subir sobre el techo hasta 70cm y vigila lo que hay alrededor del coche, de forma que es capaz de anticiparse a lo que pueda ocurrir. Su tiempo de reacción es además muy inferior al nuestro. También, si te bajas del coche, como buen «compañero», puede seguirte mientras paseas.
Por dentro los sistemas de entretenimiento y sonido están diseñados por Harman. Lo preside una gran pantalla táctil en el centro y entre los asientos lleva una base de carga inalámbrica para dispositivos. Detrás ya no hay plazas traseras. El Budii es un biplaza y donde antes llevaba los asientos traserso hay ahora dos Segway.
Pero una de las facultades más impresionantes de Budii es lo que es capaz de hacer con el volante. Lleva el sistema de dirección sin ejes, a distancia. De esta forma y gracias a un brazo robot de siete ejes es capaz de poner el volante en la derecha o en la izquierda del coche, dándole el control a cualquiera de los dos ocupantes. Y si no quereis conducir ninguno, el volante se queda en el centro y conduce él mismo.