El modelo germano tiene a sus espaldas una larga tradición: de hecho, ésta es la cuarta generación del Serie 3 familiar.
Por su parte, el Saab emplea esta carrocería por primera vez en su berlina más pequeña. Comenzando por el exterior, una cosa está clara: ambos son muy atractivos, aunque hay que reconocer que el Saab -con sus faros traseros de color blanco- se ‘lleva la palma’.
Si analizamos el apartado dinámico, el BMW se impone, gracias al excelente rendimiento de su motor diesel de 163 CV -150 en su rival- y a un chasis muy ‘afinado’.
En cuanto al espacio interior, ojo: a pesar de su ‘formato familiar’, los dos están bastante por debajo de la media, ya sea en habitabilidad o maletero -los 460 litros del BMW y los 419 del Saab están lejanos de los 580 del Skoda Octavia Combi, que mide lo mismo-.
Eso sí, sus amplios portones los hacen muy prácticos, por ejemplo, para llevar útiles de deporte. En cuanto al precio, como suele ser habitual el alemán es más caro y viene algo menos equipado de serie…
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¿Qué llevan de serie?
¿Qué añade el Saab 9-3 Sport Hatch 1.9 TID Vector ?
El 9-3 Sport Hatch cuenta con otros seis motores, cinco de gasolina -con 122, 150, 175, 210 y 250 CV- y un turbodiesel -1.9 TiD de 120 CV-. Además del acabado Vector -el más completo-, esta versión se puede adquirir con uno inferior -Linear Sport- por 30.390-.
Opciones
En otros países, como Suecia y Alemania, la denominación de este modelo es 9-3 Sport Combi. El intervalo de revisiones es de 30.000 km; en el BMW está controlado por un ordenador que además ‘vigila’ el estado del aceite. El precio de la primera revisión es de unos 250- en el Saab y en torno a los 300- en el BMW.
¿Qué añade el BMW 320d Touring ?
El BMW 320d Touring se ofrece en un único acabado, aunque con amplias posibilidades de personalización. Como su rival, puede equipar un cambio automático de seis velocidades: en el alemán cuesta 2.381e, mientras que el del Saab sale por 1.921. Muy interesantes.
Opciones
Ambos modelos obtienen la máxima puntuación -cinco estrellas- en los tests de choque EuroNCAP-dato que consiguen las berlinas-. El BMW equipa de serie unos neumáticos antipinchazos -Run Flat-; cada uno de ellos cuesta en torno a 200- -en la medida de serie, 205/55 R16-, frente a los 215e de los ‘normales’ del Saab -225/45 R 17-.
Por dentro
Saab 9-3 Sport Hatch 1.9 TID Vector

Los mandos para el equipo de audio integrados en el volante son de serie en ambos; también pueden incluir los de manejo del teléfono, que cuestan 720- en el Saab y 859e en el BMW.
El acabado Vector es el más completo de la gama -por debajo del Aero, que sólo está disponible con el motor 2.8T V6-. El logo que lo identifica se encuentra en el umbral de las puertas delanteras.
La opción de retrovisores exteriores plegables eléctricamente incluye una función que permite, pulsando un botón, que el espejo derecho baje para ver la acera mientras aparcamos; en el BMW esta función se activa automáticamente cuando insertamos la marcha atrás.
La llave de contacto -electrónica en el 9-3- va situada entre los asientos delanteros, aunque a diferencia de anteriores modelos no es necesario introducir la marcha atrás para extraerla.
Con respecto al BMW, el Saab incorpora de serie siete altavoces -seis en el modelo alemán-, asientos delanteros deportivos con tapicería mixta de piel y cuero -cuesta 679e en su rival-, maletero con doble fondo -se puede pedir en el BMW por 262e- y preinstalación para cargador de CD’s -por 74e-.
Detrás, discreto…Según Francisco, «el espacio interior del Saab es algo mejor que el de su rival, pero escaso en relación con su tamaño». A esto, Pedro añadió que «los asientos són cómodos, pero la banqueta es muy plana y escurre bastante, más aún con la tapicería de cuero»; este último elemento en opcional en ambos -865e en el Saab y… ¡2.046e! en el BMW-.
Ambos lectores destacaron la originalidad del salpicadero del Saab; les llamó la atención el botón Night Panel, que desactiva todos los indicadores y luces del cuadro y la consola -a excepción del velocímetro- para evitar que moleste su luz al conducir de noche.
También hubo consenso en lo que respecta al acabado: «No es malo, pero está por debajo de su rival por ajustes o calidad de materiales «.
BMW 320d Touring

El arranque en el BMW se efectúa introduciendo la llave eléctrónica en su hueco correspondiente y, después, pulsando este botón situado a la derecha del volante -el Saab no lo ofrece-.
Los ocupantes de las plazas traseras pueden disponer de un juego de cortinillas manuales, ideales contra el sol. El conjunto consta de cuatro -dos grandes y dos pequeñas- y cuesta 213e.
El climatizador de dos zonas es de serie en ambos modelos e incluye salidas de aire para las plazas traseras. Los dos pueden incorporar asientos calefactables -428– en el BMW y 264 en el Saab-; el primero puede equipar unos cristales que reducen la temperatura interior -cuestan 453–-.
En la puerta del conductor están agrupados los mandos de retrovisores y elevalunas eléctricos; estos últimos son de ‘un toque’ -la ventanilla baja o sube con una sola pulsación de la tecla-.
Detrás, justo…Respecto a las plazas traseras del Saab, ambos lectores fueron unánimes: «Resulta bastante justo en lo que respecta a altura, mientras que el túnel de transmisión deja muy poco espacio para las piernas y pies, por lo que un tercer pasajero no viajará cómodo».
Los tres reposacabezas son de serie;-en el Saab el central cuesta 96–;-por maletero, se impone al 9-3.
«Su diseño resulta algo sobrio si lo comparamos con el Saab, pero en lo que respecta a calidad, el BMW merece un sobresaliente», comentó Pedro. Ambos también destacaron la claridad de la instrumentación del alemán, aunque la información es justa -no equipa termómetro de agua-.
También les agradó el acabado metálico del salpicadero, un elemento disponible en opción -357–-.
El BMW cuenta con elementos no disponibles en el Saab, como el medidor de consumo instantáneo y el indicador del nivel de aceite. De serie, también incluye otros como el ordenador de a bordo -350- en el Saab-, mientras que su equipamiento opcional es mucho más extenso, incluyendo elementos como el sintonizador de televisión -4.142–, opción que está vinculada al navegador-.
Por fuera
Saab 9-3 Sport Hatch 1.9 TID Vector

Deportivo…El diseño de la parte trasera «es muy original, pero la línea del Serie 3 es más equilibrada», comentaron ambos lectores.
El Saab es más largo que su oponente -alcanza los 4,65 m, frente a los 4,52 de su rival- y su coeficiente aerodinámico es ligeramente peor: Cx de 0,33 por 0,30 del BMW. El techo eléctrico practicable cuesta 1.057–; el que puede llevar el BMW es panorámico y cuesta 1.667–.
1.- Retrovisores eléctricos y con buena visibilidad en ambos modelos. 2.- Las clásicas manetas de Saab son menos robustas que las de su rival. 3.- En ambos el logo que identifica la versión se emplaza en el portón trasero. 4.- Los dos equipan antenas de tipo ‘aleta de tiburón’, situadas en la parte trasera del techo. 5.- Los pilotos traseros verticales y translúcidos del 9-3 son más originales que los del 320d y más fáciles de ver de lejos.
BMW 320d Touring

Robusto…«Debido a la mayor anchura del BMW -1,82 m, por 1,76 del Saab- transmite mayor sensación de robustez», comentó Pedro. Por 3.866– se puede montar el Pack M, que incluye paragolpes deportivos y suspensión rebajada.
Asimismo, por 834– se le puede instalar un control de aparcamiento delantero y trasero -en el Saab, sólo trasero, pero cuesta 413–-.
1.- Estas barras del techo son de serie en el BMW -96– en el Saab-, y se pueden eliminar sin sobrecoste. 2.- El plegado eléctrico de los retrovisores cuesta 275– -192 en el Saab-. 3.- Estas llantas de 17″ cuestan 1.132– -en el Saab son de la misma medida, pero de serie-. 4.- La luneta trasera practicable es de serie -no disponible en su rival-. 5.- Los faros de xenón con lavafaros cuestan 1.068e -son de serie en el Saab-.
Bolsillo
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Equipamento
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En marcha
El Saab comparte motor con modelos como el Alfa 159, el Opel Vectra y el Cadillac BLS , Saab 9-3 Sport Hatch 1.9 TID Vector

Un motor ‘con nervio’…Nuestros lectores subrayaron el ‘carácter’ del motor del Saab: «Su respuesta es más ‘explosiva’ que en su rival a partir de 2.000 rpm, aunque por debajo de ese régimen empuja claramente menos».
Por su parte, Francisco alabó el buen funcionamiento del cambio -manual y de seis marchas, como en su rival-: «Tiene muy buen tacto y unos recorridos cortos entre marchas». En cuanto a los frenos, ambos modelos recibieron elogios por su eficacia.
¡Despegamos… «El puesto de conducción del Saab es, en general, muy bueno: los asientos sujetan a la perfección, el cambio está bien situado… Eso sí, el volante es demasiado grande, y los mandos del limpiaparabrisas y los intermitentes tienen un tacto mejorable», comentó Francisco.
A esto, Pedro añadió que «la visibilidad es buena, y la regulación eléctrica de los asientos resulta muy cómoda»; este elemento es opcional por 1.455– -1.297 en el BMW 320d-. Un dato: los reposacabezas del 9-3 son de los más seguros del mercado.

En este modelo, ningún conductor tendrá problemas para encontrar la postura perfecta , BMW 320d Touring
Perfecto...»Lo mejor del puesto de conducción del BMW -que envuelve más al conductor que el del Saab- son los amplios reglajes en altura y longitud del asiento» destacó Pedro, «aunque el mando para el ajuste vertical de la butaca no es muy preciso», añadió Francisco.
Quienes deseen más disponen en opción de asientos deportivos por 728–. Por último, Pedro criticó la falta de huecos para dejar pequeños objetos, algo aplicable también a su rival; eso sí, por 238– se puede instalar un pack portaobjetos -288– en el Saab-.
Sí, nos gusta conducir…«El motor del BMW es magnífico: es más rápido que el de su rival, suena y vibra menos… y gasta lo mismo. Además, el bastidor ofrece una relación más conseguida entre confort y deportividad», comentaron ambos lectores.
Como principal defecto, ambos coincidieron en señalar la excesiva dureza del embrague y de la palanca de cambios. La dirección, por el contrario, resulta más precisa y rápida que la de su oponente.
Ficha técnica
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El veredicto de los lectores
Pedro M. Labarra
Francisco Velázquez
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El veredicto de Autofácil
BMW 320d TOURING Es excelente por calidad, comportamiento, prestaciones… pero no es el familiar perfecto por habitabilidad trasera. Eso sí, tiene más maletero que el 9-3.
SAAB 9-3 SPORT HATCH 1.9 TiD Su original diseño ‘dice más’ que el de su rival; no defrauda por prestaciones, pero en calidad y en refinamiento general está un punto por detrás.
Conclusión
Teniendo en cuenta que el factor precio no llega a ser decisivo -y que hablamos de coches bastante caros en cualquier caso- nos quedaríamos con el alemán, que ofrece un mayor agrado de conducción.
Saab 9-3 Sport Hatch 1.9 TID Vector
8 |
BMW 320d Touring
8,5 |