Este todoterreno, que comparte muchos elementos con el Cadillac SRX, se sitúa por apariencia y tamaño por encima del 9-3X, al que supera ampliamente en tecnología, potencia y prestaciones. En el momento de su lanzamiento, el 9-4X dispondrá de dos potentes motores de gasolina V6, ambos acoplados a transmisiones automáticas de seis velocidades: un 3.0 atmosférico de 265 CV y un 2.8 con turbocompresor de doble entrada que se estira hasta los 300 CV, éste último disponible únicamente en las variantes Aero. Estas cifras superan con creces los 210 CV de potencia máxima que ofrece en la actualidad el 9-3X. Como no podía ser de otra forma, este nuevo crossover utiliza la tracción total Saab XWD.
El más básico, el de 265 CV, acelera de 0 a 100 km/h en 9,0 segundos, mientras que el de 300 CV baja ese registro hasta los 8,3 segundos.
Diseño escandinavo
Por fuera vemos una imagen muy parecida a la que ya hemos visto en el 9-5, con la típica parrilla, los faros característicos de la marca o la particular línea de cintura. La línea del techo es baja y se prolonga en forma de alerón por la parte alta del portón trasero. Al igual que el sedán, la zaga queda dominada por un tubo de LED que se prolonga por toda la trasera.
Como suele ocurrir con los modelos de la marca sueca, no hay elementos superfluos en su diseño exterior: sólo vemos una protección oscura en la parte inferior, pero carece de protecciones especiales, molduras innecesarias o revestimientos de ruedas. De serie monta llantas de aleación de 18 pulgadas, mientra que las versiones Aero incorporan llantas de 20 pulgadas de nueve radios.
Por dentro, el habitáculo es prácticamente igual que el del 9-5, con todos los mandos orientados al conductor y dispuestos alrededor de éste en forma de arco. En cuanto a habitabilidad, la marca asegura que acoge con comodidad a cinco ocupantes, aunque habrá que comprobar en persona cómo se viaja en las plazas traseras -sobre todo en las versiones con tres filas de asientos-. Los asientos incluyen de serie ajuste eléctrico de ocho posiciones para el conductor. En cuanto a tecnología de entretenimiento, los pasajeros pueden disfrutar de conexiones USB y AUX, equipo de sonido Bose con siete o diez altavoces, navegador de 8- con pantalla táctil y disco duro de 10 Gb, Bluetooth, etc.
En marcha
Para mejorar el confort en marcha, la tracción total Saab XWD ajusta la entrega de par entre ambos ejes para mejorar la adherencia según la condición de la carretera. Esta tecnología se combina con el control electrónico autoblocante eLSD del diferencial trasero, que puede transferir hasta un 50% del par entre las ruedas traseras para conseguir mayor adherencia. Además, las versiones Aero cuentan también con un sistema de amortiguación activa conocida como Saab DriveSense, que ajusta constantemente la suspensión para que el vehículo se adapte de la mejor manera posible al modo de conducción y al estado de la carretera. Al margen de estos reglajes automáticos, el conductor puede elegir entre tres modos de conducción: Confort, Sport y Eco.
Otras ayudas a la conducción son la dirección de esfuerzo variable y la iluminación adaptativa de bi-xenón.
Su llegada al mercado está prevista para mayo de 2011 en Estados Unidos y para agosto en Europa y otros mercados globales. Pero para abrir boca, el mes que viene podremos verlo vestido de gala en su puesta de largo oficial, que tendrá lugar en el Salón de Los Ángeles.
