Desde 1975, Seat fabricó, bajo licencia Fiat, este modelo que se situaba justo por debajo del 132 -la berlina de lujo de Seat en la época-.
El CLX 2000, a la venta desde 1980, era la versión deportiva del 131; se distinguía por las llantas de aleación, el cambio de cinco velocidades y los anagramas externos en el maletero.
Carrocería y versiones
El 131 tenía una carrocería de cuatro puertas -el preferido por los taxistas y la policía de la época- y otra de cinco -familiar con 600 l de maletero-. Además, del 131 se fabricaron tres versiones: la ´L´ con faros rectangulares -el más barato-, la ´E´ con faros redondos -desde 1975-, y el más equipado Supermirafiori -1978– con faros cuadrados y que compartía carrocería con el CLX 2000.
Motores
El 131 tuvo tres propulsores diesel -el preferido de los taxistas era el de 2.5 l y 72 CV con el capó ´abombado´– y cuatro de gasolina -el más potente, el CLX 2000 de 114 CV de nuestro lector-.
Rivales
Berlinas con carácter deportivo como el Renault 12 TS, el Triumph Dolomite..
Hasta 6.000€
La escasez de unidades obliga a pagar este precio por los CLX 2000 mejor conservados.
Antonio Palomares
Reside en Terrassa, Barcelona, tiene 38 años y es el dueño de este Seat 131 CLX 2000. Ocupación: Jefe de obra.Aficiones: Motor. Años de carnet: 20. Coche actual: Land Rover Discovery 3 TDV6 Su sueño: Porsche 997 Turbo.
Su ´primo´ italiano
El Fiat 131, pilotado por Walter Rohrl, consiguió el Campeonato del Mundo de Rallyes de 1980 y, para celebrarlo, Seat construyó el 131 CLX 2000; sólo se fabricaron 1.800 uds. -900 en color cobre y 900 en plata-.
Por dentro y por fuera
Fuera: discreto, pero elegante : «Llama la atención la ausencia de cromados -ni en los paragolpes-, la antena situada en el centro de la tapa del maletero o las pequeñas llantas de 13?. Los protectores de caucho de las puertas no son muy estéticos, pero evitan más de un arañazo o abolladura».
Caben cinco adultos sin problema : «Por espacio interior, las plazas traseras eran suficientes para tres adultos.Hay que reconocer que la suspensión trasera -eje rígido- resultaba incómoda ya que transmitía fielmente al interior cualquier irregularidad del terreno. Carece de lujos como el aire acondicionado o el cierre centralizado -ni en opción-, pero de serie incluye gadgets como el retrovisor del conductor eléctrico, los faros antiniebla o motor con encendido electrónico, algo bastante novedoso en su época «.
Así iba
En marcha: «Pese a su aspecto simplón y aburguesado, bajo el capó de este 131 CLX 2000 se encuentra un motor potente y con un sonido cautivador. Alcanza las 7.000 rpm, algo que le permite llegar sin demasiado esfuerzo a su velocidad punta -180 km/h-. Además, el consumo no es excesivamente elevado pese a su potencia: de media, gasta unos 8,5 l/100 km y es muy difícil sobrepasar los 12 l/100 km ni en ciudad ni viajando a ritmos ´ilegales´ por autopista. Adapta un cambio manual de cinco marchas».
Más detalles :
1- El retrovisor del conductor era eléctrico y el mando estaba junto al freno de mano. 2- La tapa de la guantera era de corredera. 3- Las salidas de ventilación tenían una función -DEF- para desempañar los cristales
Compacto de referencia€
Lo bueno € Diseño llamativo -sobre todo en su parte trasera-; motor sencillo y fiable. Amplia capacidad del maletero -300 litros-; efectividad de los frenos -su peso contenido ayudaba en gran medida-; y dirección muy directa aún sin tener ninguna asistencia.
Y lo malo € La insonorización del habitáculo era mejorable debido a la ausencia de protecciones en el vano motor desde donde se transmitía mucho ruido; el recorrido de la palanca de cambio era largo; y en las plazas traseras ni un niño viajaba con comodidad.
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FICHA TECNICA
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