Crear GTI’s es la nueva ‘afición’ de Seat, con la particularidad de que muchas de esas creaciones incorporan potentes motores… de gasóleo.
Este es el caso del Ibiza Cupra, que incluye una nueva evolución del conocido propulsor 1.9 TDI -esta vez con 160 CV-, que muestra un rendimiento impresionante desde 2.000 hasta casi 4.000 rpm y registra unas prestaciones excepcionales -a la altura de un Peugeot 206 RC-… con la ventaja de que consume poco. Dicho motor se complementa con un chasis muy eficaz , pero que supedita claramente la comodidad.¿Estamos ante el deportivo ideal? Quizá el día que los diesel alcancen las 7.000 rpm…
Por dentro y por fuera
El interior del Cupra es prácticamente igual que el del resto de la gama. Esto significa que su calidad general es más que correcta, su diseño un poco soso, y la disposición de todos los mandos muy acertada. A gusto: La postura de conducción es buena: tanto el volante como el asiento son multi-regulables. El espacio interior y el maletero son como los de otros Ibiza, pero donde el Cupra pierde enteros es en comodidad de marcha. Cansa: No sólo la suspensión es firme, además en el interior se percibe mucho ruido aerodinámico y de rodadura a partir de 140 km/h.
Veredicto
Este Ibiza es un bombón… pero por el mismo dinero hay coches más racionales.
Por qué comprarlo: Por su impresionante comportamiento y la relación entre lo que anda y lo que consume..
Por qué no comprarlo: Su precio se aproxima ‘peligrosamente’ al de un Seat León FR TDI, más grande y cómodo.
Lo que otros no te cuentan
¿Sport, FR o Cupra? La gama deportiva del Ibiza en gasóleo arranca con el TDI 130 Sport , que cuesta 15.830€ y es el más equilibrado. Más rácing resulta el FR, que equipa el mismo motor, pero ofrece un aspecto y un chasis más deportivos: cuesta 17.575€. Pero, quien desee un deportivo puro, deberá esperar hasta después del verano, que es cuando llega el Ibiza Cupra de gasolina 1.8 T de 180CV.
Ficha Técnica
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