La conectividad en el automóvil es ya un requisito casi indispensable para los usuarios a la hora de elegir qué coche nuevo se compran y los fabricantes se esfuerzan por potenciar cada vez más la parte tecnológica de sus vehículos para intentar que el coche sea algo más que un medio de transporte, pudiendo integrarlo incluso en la vida doméstica o laboral con diferentes aplicaciones de control remoto u otros sistemas similares. Además de esto, los fabricantes también intentan que sus sistemas multimedia sean cada vez más eficaces y no distraigan al conductor de la carretera para mejorar la seguridad vial.
Uno de los mayores avances tecnológicos de los últimos años es la integración de los smartphones en el sistema de infoentretenimiento de los coches gracias a aplicaciones como CarPlay para Apple o Android Auto, que permiten replicar en el sistema multimedia de nuestro vehículo, la propia interfaz del teléfono móvil. Así, el conductor puede utilizar su teléfono desde la propia pantalla del coche, evitando las multas por el uso del móvil al volante. Sin embargo, la utilización de estos sistemas también tiene su riesgo a nivel de seguridad vial, ya que despista a los conductores de la carretera y puede provocar accidentes.
Teniendo en cuenta todo este contexto tecnológico y con el objetivo de evaluar el impacto de los sistemas de infoentretenimiento de última generación en los conductores y la seguridad vial, la Asociación Automovilística Estadounidense ha realizado un completo estudio junto a la Universidad de Utah en el que ha analizado 30 nuevos modelos en el mercado de Estados Unidos. Un grupo de estudio sacó el máximo partido a estos sistemas mientras conducían, utilizando la pantalla táctil o comandos de voz para diferentes funciones como realizar una llamada, activar la radio, el navegador o activar la radio.
Los resultados del estudio han sido muy negativos en materia de seguridad vial, ya que ninguno de los sistemas de infoentretenimiento evaluados pudo demostrar que necesitase poca atención por parte del usuario. Es más, hasta 23 sistemas de infoentretenimiento requieren de sus usuarios una elevada o muy elevada atención.
Si nos centramos en las aplicaciones que más peligro pueden representar para la seguridad vial, el hecho de programar el navegador a través de estos nuevos sistemas ocupa el primer lugar, ya que necesita de 40 segundos de atención por parte del usuario. Le siguen escribir mensajes de texto, coger una llamada y escuchar música.
La tecnología sigue avanzando y el objetivo de todas las partes implicadas en la movilidad es reducir al máximo la siniestralidad. Sin embargo, el correcto uso de sistemas tecnológicos de última generación como los dispositivos de infoentretenimiento, son responsabilidad de conductores y usuarios.